MINNEAPOLIS, MN
Luego del ataque terrorista perpetrado durante un concierto de Ariana Grande en Manchester, en el que murieron 22 personas y más de 50 resultaron heridos, las autoridades de ese país han aumentado la alerta de seguridad ante otro ataque “inminente”.
En el atentado, que se han adjudicado extremistas islámicos, perecieron 12 niños menores de 16 años, incluyendo una niña de 8. La explosión ocurrida al final del concierto y provocada por un atacante suicida, provocó que los fanáticos de la cantante salieran en estampida de la Arena Manchester.
Este acontecimiento ha provocado que las autoridades alrededor del mundo hayan elevado sus alertas de seguridad y ahora tendrán que poner más atención sobre los eventos masivos donde haya “objetivos indefensos” para los ataques terroristas, de acuerdo al consultor de seguridad Michael Rozin.
El Súper Bowl que se celebrará el año que entra en esta ciudad tendrá una seguridad extensiva.
Para proteger a los “objetivos indefensos” a los alrededores del US Bank Stadium “además de la seguridad local, estará involucrada seguridad nacional. Esto es una cooperación a todos los niveles y coordinación”, de acuerdo al experto de seguridadJack Rice en entrevista con Kare 11.
Pero la diferencia entre Minneapolis y Houston donde se hizo el ultimo Súper Bowl, “es más complejo que eso, en el sentido de que en Houston tienen 5 mil 500 oficiales de policías y nosotros tenemos menos de 900”, explicó Janee Harteau en febrero “entonces tenemos que confiar en otros departamentos dentro de las ciudades gemelas y el estado.
Y de acuerdo a Rice “una de las ventajas que tiene Minneapolis sobre Houston es que geográficamente es más pequeña, por lo que se puede concentrar a los oficiales de forma diferente” y cree que los “objetivos indefensos” estarán monitoreados como parte de todo el plan de seguridad.
El Departamento de Policía de Minneapolis dijo que en este momento no creen que haya una amenaza de un ataque terrorista planeada para el Súper Bowl en 2018.
El Departamento de Policía en Manchester, identificó al atacante como Salman Abedi, de 22 años y quien falleció en el ataque y arrestaron a un hombre de 23 años.
El presidente estadounidense Donald Trump calificó a los perpetradores como “perdedores diabólicos” y dijo que “esa malvada ideología debería de ser borrada”.
El ataque en Manchester es uno de los ataques más mortales en Gran Bretaña desde el 2005, cuando una bomba estalló en un tren subterráneo y un autobús matando a 52 personas.
