EDEN PRAIRIE, MN
La carrera presidencial de este año tuvo un sinnúmero de sorpresas, la principal y la más grande fue la nominación del partido Republicano del magnate y estrella de televisión Donald Trump como su candidato y aunque durante su campaña no tuvo muchas propuestas que ofrecer al electorado, en el momento final dio la batalla y la ganó.
Hasta la primera hora de hoy, New Hampshire, Pensilvania, Arizona, Wisconsin y Michigan, estados clave en esta elección no habían revelado los resultados debido a la cercanía en la que se encontraban ambos candidatos y donde Donald Trump llevaba una ligera ventaja.
Al contabilizarse la mayoría de los votos, hoy Donald Trump se ha convertido en el presidente 45 de esta nación, al llevarse 289 puntos electorales ganando 10 de los estados claves los cuales le proporcionaron 147 votos electorales.
Por primera vez desde 1928, el partido Republicano tiene el control de la Casa Blanca, del Senado y la Cámara de Representantes.
La desconcertante victoria del republicano estimuló un brusco descenso en los mercados a futuro en Estados Unidos y un amplio vuelo hacia la seguridad alrededor del mundo.
Casi 60 minutos antes de la apertura de Wall Street, el Dow Jones Industrial había bajado 250 puntos, después de tambalearse 800 puntos durante la noche.
Standard and Poor’s 500, tuvo un caída del 5 por ciento, el índice Nikei de Japón también cayó un 5 por ciento, el precio del crudo tuvo una baja del 3 por ciento y el dólar sufrió una perdida del 3.6 por ciento frente al yen japonés, mientras que los precios del Tesoro estadounidense y otros bonos de países ricos subieron, mandando a los rendimientos hacia abajo. El dólar subió 11 por ciento frente al peso mexicano y el precio del oro aumentó casi un 5 por ciento.
Después de una campaña electoral en la cual se ha acusado a Rusia de interferir abiertamente a favor de Donald Trump, su sorpresiva sorpresa rompió en aplausos dentro del Parlamento Ruso y una llamada corta por parte del presidente Vladimir Putin, por una “nueva era de relaciones” entre su país y Estados Unidos.
Calificado por los expertos como “no apto para gobernar”, Donald Trump ha abierto una nueva era, no solo para sus ciudadanos blancos, sino para las minorías, quienes esperan que la retórica del ahora presidente, haya sido una estrategia de campaña para ocupar la oficina oval.
