MINNEAPOLIS, MN
Unos 12 millones de inquilinos, en su mayoría de bajos ingresos, quedarán expuestos a recibir notificación de desalojo después de que expire esta medianoche una moratoria federal de los desahucios aprobada en marzo para paliar el impacto económico de la pandemia de COVID-19.
“Hay mucha gente afectada, el número de inquilinos afectados es tan alto y, en medio de la pandemia, es un momento terrible para desalojar a la gente”, dijo a Efe Ricardo Román, un abogado de la Ayuda Legal Texas Río Grande.
En numerosas ciudades de todo el país se han organizado manifestaciones como la que harán mañana grupos de inquilinos en Maryland, que marcharán hacia la residencia del gobernador Larry Hogan, en Annapolis, para demandar una suspensión de los desalojos.
Según los organizadores “aproximadamente 145.000 personas en Maryland están en riesgo de perder sus viviendas”.
Por su parte, Evelin Urrutia, directora de Inquilinos y Trabajadores Unidos (TWU), una organización con sede en Alexandria, Virginia, dijo que “deberían parar el pago de los alquileres durante la pandemia”.
“No deberían cobrar porque la gente no trabaja, o les han bajado sus salarios. Muchos en nuestra comunidad no han podido pagar el alquiler porque no tienen dinero. Otros solo tienen una parte del dinero y los propietarios no aceptan el pago parcial, o les imponen cargos por pago atrasado”, añadió.
El representante Jesús García, demócrata de Illinois, dijo al diario The Hill que “las comunidades en todo el país necesitan protección del desalojo y ayuda para la vivienda a fin de evitar los desahucios en masa y el desamparo”.
“Si no actuamos será imposible recuperarnos de la pandemia de coronavirus y de la crisis económica”, sostuvo.
La moratoria federal se aplica solo a las propiedades donde los alquileres están subsidiados por el Gobierno con préstamos para la reparación o mantenimiento de los edificios, o con unidades reservadas para inquilinos dentro del programa conocido como Sección 8. Estas unidades son aproximadamente el 25 % de todas las viviendas en alquiler en Estados Unidos, de acuerdo con el Instituto Urbano.
Por ejemplo, si un propietario tiene en alquiler un edificio con 100 apartamentos y 20 de ellos están reservados para inquilinos dentro de la Sección 8, todos los demás inquilinos han estado cubiertos por la moratoria federal.
El Congreso, que se ha ido de fin de semana largo, no ha tomado decisión sobre los desalojos aunque algunos demócratas, como la senadora Kamala Harris, de California, ha promovido un programa de 100.000 millones de dólares para dar ayuda a los inquilinos, extendiendo además la suspensión de desahucios por 18 meses.
De acuerdo con el grupo comunitario Eviction Defense Project, de Colorado, 110 millones de personas viven en unidades alquiladas, incluidas las privadas y las que reciben subsidios del Gobierno. Ese grupo calcula que 20 % de las unidades reciben ayuda del gobierno (22 millones de personas).
El abogado Román explicó que los inquilinos no serán desalojados de inmediato dado que la ley requiere que los propietarios de las viviendas avisen con antelación de 30 días que iniciarán la demanda por desahucio ante los tribunales. “Uno tiene otros 30 días para ponerse al día. Si el propietario no da la notificación no puede empezar el proceso”, expuso.
Las leyes estatales y locales también matizan la aplicación del proceso de desalojo. En Texas, dijo Román, la ley del estado requiere solo tres días de notificación, pero se aplica la ley federal con el aviso de 30 días. El Distrito de Columbia extendió la moratoria hasta octubre.
Otro beneficio que ha tenido la moratoria federal es en el recargo de tarifas por pagos atrasados ya que si el inquilino puede pagarlas antes de que el propietario envíe el aviso de desahucio, el inquilino no debe pagarlas.
“Algunos jueces están creando sus propias moratorias”, añadió Román, por ejemplo extendiendo el plazo hasta septiembre porque estos son momentos terribles para desalojar a la gente. Los jueces han sido comprensivos y continúan sus propias moratorias, puntualizó.