MINNEAPOLIS, MN
La pandemia de COVID-19 y la decisión de los Diez Grandes de posponer los deportes de otoño de 2020-21 ha aumentado enormemente las preocupaciones financieras de las instituciones educativas en los Estados unidos.
La universidad de Minnesota emitió un mensaje abierto dando a conocer la suspensión de programas deportivos exitosos a nivel nacional pero que no se adaptan del todo a las circunstancias actuales en cuanto a finanzas, situación mundial en salud y a estadísticas de matrícula en género dentro de la casa educativa. Este es parte del mensaje de la institución.
Nuestro departamento de deportes ahora enfrenta una pérdida de ingresos proyectada de aproximadamente $75 millones tan solo este año fiscal. Se trata de un déficit significativo que tendrá un impacto en los próximos años. Al mismo tiempo, nos mantenemos firmes en nuestro compromiso de brindar oportunidades de participación equitativas en género del Título IX que estén estrechamente alineadas con nuestros porcentajes de inscripción de estudiantes universitarios masculinos y femeninos. Somos conscientes de que nuestros programas deportivos han trabajado para ajustar sus oportunidades de participación para mantener el ritmo de nuestros crecientes porcentajes de población femenina de pregrado.
Como resultado, hemos determinado que el Atletismo ya no puede sostener económicamente o de manera equitativa 25 programas universitarios y, en espera de la aprobación de la Junta de Regentes, descontinuaremos el atletismo interior masculino, el atletismo masculino al aire libre, la gimnasia masculina y el tenis al finalizar su temporada de competición 2020-21. Si las precauciones de salud y seguridad lo permiten, estos equipos tendrán la oportunidad de competir durante la temporada 2020-21.
Nuestro objetivo durante los últimos años fue crear un departamento atlético ágil, uno que fuera autosuficiente, compitiera al más alto nivel y brindara una experiencia de primera clase para nuestros estudiantes-atletas. Experimentamos una recaudación de fondos de nivel récord durante los últimos años y redujimos nuestros presupuestos operativos durante el año fiscal 2019 y el año fiscal 2020. Cuando llegó el COVID-19, hicimos ajustes y los miembros de nuestro equipo ejecutivo y varios entrenadores en jefe se ofrecieron como voluntarios para dos reducciones salariales separadas. Anteriormente redujimos $ 5 millones de nuestro presupuesto para el año fiscal 21 e implementamos congelaciones de contrataciones y gastos. A pesar de estos esfuerzos financieros, todavía no podemos sostener 25 programas.
Además de los desafíos financieros y los compromisos de equidad de género, también consideramos el impacto en la comunidad, el interés local y nacional, la competitividad y el patrocinio deportivo en el nivel Big Ten y la División I de la NCAA al tomar esta decisión.
Entendemos que esta es una noticia devastadora para los estudiantes-atletas, entrenadores y personal afectados. También reconocemos el efecto dominó que esta decisión tendrá en todos nuestros estudiantes-atletas y en antiguos ganadores de cartas, ex alumnos, donantes, familiares, amigos y fanáticos que han participado y apoyado por estos cuatro programas a lo largo de los años. No tomamos esta decisión a la ligera.
