SAINT PAUL, MN
Hace poco mas de una década comenzaba a hacerse mas latente la presencia de una nueva generación de inmigrantes en los Estados Unidos y Minnesota no era la excepción, en especial, este era un movimiento el brindado por las nuevas comunidades de Hispanos llegados directamente de países como el México. Positivos focos económicos se desarrollaban ya de parte de estas comunidades dentro de áreas especificas, ayudando a la recuperación de vecindarios de la mano de nuevos empresarios que brindaban un suplemento de artículos y bienes específicamente para estas comunidades. Era evidente que las cosas estaban cambiando.
Con ello decenas de iniciativas se generaron gracias a la necesidad de dar servicio y abasto a esta nueva comunidad Mexicana en Minnesota. Un problema constante era la falta de documentación, la necesidad de una agencia local que pudiera tramitar servicios esenciales en materia de documentación para la comunidad. Muchas personas, carentes de estos documentos, viajaban hasta la sede del Consulado Mexicano en Chicago, sacrificando tiempo, dinero y esfuerzo en la obtención de estos. Para entonces, se estimaba existían 99,000 Mexicanos en Minnesota (2004)
El año 2004, Minnesota fue testigo de la visita de un Presidente Mexicano, Vicente Fox visito las Ciudades Gemelas para dialogar con el entonces Gobernador de Minnesota Tim Pawlenty, sobre comercio internacional, las relaciones entre ambos, Mexico y Minnesota, la situación y las necesidades de esta comunidad Mexicana en Minnesota. Para muchos, esto sentó las bases de lo que hoy es la presencia del hoy Consulado de México en Saint Paul, Minnesota.
Hace 10 años llegó a ocupar la oficina del Consulado de México en St. Paul el cónsul Nathan Wolf. Eso fue en el mes de junio de 2005, y fue entonces que Minnesota comenzó a desarrollar una fructífera relación con diversos sectores de la población mexicana en el estado, y con el país en su totalidad.
Hoy, y de acuerdo con el reporte de economía y comercio exterior del Departamento de Empleo y Desarrollo Económico (DEED), México esta entre los tres principales socios comerciales del estado, rebasando incluso a China en ese papel.
Luego del cónsul Wolf, siguió la cónsul Ana Luisa Fajer, y hoy la representación consular cuenta con el liderazgo del cónsul Alberto Fierro. Cada uno de estos Cónsules ha sabido desarrollar un eje de unión entre las comunidades de inmigrantes Mexicanos de distintas generaciones, cada uno en cada uno de sus tiempos ha logrado solventar este ente como un punto clave para el desarrollo y mas visibilidad de la comunidad Mexicana como contribuyente al panorama social y económico de Minnesota, de la comunidad, desarrollar un sistema de sinergías, de conectividad entre ambos país y estado para el fomento de relaciones diplomáticas y comerciales entre ambos, además de coordinar y trabajar dentro de diferentes estrategias de beneficio comunitario.
Los tres mencionados Cónsules estuvieron esta tarde presentes en la celebración de este décimo aniversario, evento en el que participaron cerca de 400 invitados, y quienes fuimos testigos de la entrega de tres medallas Ohtli (reconocimiento que entrega el gobierno mexicano a personajes notables que sirven a la comunidad mexicana), en manos de Uri Camarena, Elia Bruggeman, y Mariano Espinoza.
Los presentes degustaron de una celebración estilo mexicana, en el hermoso escenario que ofrece el Pabellón Clarence W. Wigington, en la isla Harriet de Saint Paul. El Pabellón se vio adornado con papeles de colores, semejantes a los empleados en las grandes celebraciones mexicanas, además de comida ofrecida por dos famosos proveedores de comida mexicana en las ciudades gemelas. Una gran piñata adornaba el centro del salón, y el clima resultó completamente favorable para el evento.
En el mismo se dieron cita representantes de los sectores educativo, de negocios, artístico, y de diversas expresiones culturales.
Luego de sendos discursos pronunciados por los cónsules Wolf, Fajer y Fierro, la ceremonia de entrega de reconocimientos tuvo lugar, y los galardonados ofrecieron sus propios discursos de agradecimiento, destacando el énfasis sobre el trabajo desarrollado por los cónsules, y el compromiso que ellos asumían por continuar colaborando por México y por los mexicanos en Minnesota.
Poco después, irrumpió la clásica música de mariachi, que acompañó la tertulia por el resto de la tarde, en la que se pudieron observar encuentros y reencuentros. Todos buscaban con convicción el saludar y felicitar a los cónsules, y poder charlar con ellos.
Todos los asistentes pasaron un tiempo fabuloso, con la coincidencia de buscar celebrar un evento significativo en Minnesota: 10 años de representación consular de México, con grandes resultados en el ámbito de negocios y en el de educación, y aun con mucho por lograr.
Felicidades a los mexicanos en Minnesota, los casi 200,000 que hoy se cuentan, por dicha celebración.