MINNEAPOLIS, MN
México goleó por 3-0 a Honduras, Catar se impuso por 3-2 a El Salvador y estas dos selecciones ganadoras se instalaron este sábado en las semifinales de la Copa Oro que se disputa en territorio estadounidense.
Los partidos de hoy se jugaron en el State Farm Stadium, de Phoenix.
México, campeón de la decimoquinta edición del torneo, se medirá con el ganador de la serie entre Costa Rica y Canadá, que jugarán este domingo en el AT&T Stadium, de Arlington (Texas).
Catar, anfitrión del próximo Mundial, tendrá como próximo escollo a Estados Unidos o Jamaica.
En un partido que bien pudo haber prescindido del segundo tiempo, México hoy no dio margen a la selección de Honduras, que no tuvo en el banquillo al entrenador uruguayo Fabián Coito, afectado por covid-19.
A los 26 minutos salió el primer gol de las botas del delantero argentino nacionalizado mexicano Rogelio Funes Mori, una de las figuras del torneo.
Jonathan Dos Santos aumentó cuando se cumplía el minuto 31 y a los 38 selló la goleada Orbelín Pineda.
Catar parecía tenerlo todo resuelto en apenas 8 minutos, tiempo en que ya ganaba a El Salvador por 2-0, pero terminó contra las cuerdas y pidiendo tiempo.
Dirigida por el entrenador Félix Sánchez, la selección de Catar dominaba gracias a los goles de los delanteros Almoez Ali y Abdelaziz Hatim.
Un penalti muy discutido concedido por el árbitro mexicano Fernando Hernández dejó el encuentro en un 3-0 cómodo en el minuto 55.
Pero cuando el partido parecía caso juzgado, Joaquín Rivas acercó a los salvadoreños con un doblete marcado en los minutos 63 y 66.
Primero entró al área por el centro y venció el achique del arquero Meshaal Barsham. Poco después se benefició de un gran robo de Bryan Tamacas en el área, y definió con un disparo arriba.
Rivas provocó la euforia en las tribunas del Estadio de la Universidad de Phoenix con una tercera diana, pero fue anulada en el minuto 72 por posición adelantada.
En la reposición volvió a tener la opción de gol con una media vuelta que tapó magistralmente el arquero Meshaal Barsham, de Catar, que acabó pidiendo la hora, pero se quedó con el sufrido y cuestionado triunfo ante un equipo de El Salvador que mereció más por todo lo que hizo en la segunda parte.
