Houston
Antes de que comenzase el juego entre los Astros de Houston y los Bravos de Atlanta para el segundo partido de la Serie Mundial, el diamante del Minute Maid Park, fue el escenario ideal para que el 50 Premio Roberto Clemente le fuese entregado al veterano toletero dominicano Nelson Cruz por sus iniciativas filantrópicas.
A sus 41 años, Cruz viene de conectar 32 jonrones con OPS de .832 y OPS+ de 130 en la temporada del 2021, en la que ayudó a Tampa Bay Rays a terminar de ganar el Este de la Liga Americana con un total de 100 victorias. Eso, combinado con sus iniciativas humanitarias, le hizo merecedor distinguido del prestigioso premio.
“Muy contento. Bendecido“, dijo Cruz, el cuarto dominicano en ganar el galardón, después de Sammy Sosa, Albert Pujols y David Ortiz. “Me siento muy regocijado, yo y mi familia. Creo que todo el país (de República Dominican) se siente muy contento por el premio. Es muy bonito hacer esa clase de labor, sin pedir nada a cambio.
Pero sobre todo, Cruz dijo que lo más importante era que se sintiera la motivación de seguir haciendo las cosas que has venido haciendo y consideras positivas.
“Si creces como latinoamericano, oyes siempre hablar de Roberto Clemente”, expresó. “Nunca tuve la oportunidad de verlo jugar. Sabía que era un gran pelotero. Cuando llegué a Estados Unidos descubrí que no sólo jugaba bien, sino que era un gran ser humano”.
El reconocimiento de las Grandes Ligas por filantropía se instauró en 1971 y fue rebautizado con el nombre de Clemente en 1973.
El pelotero puertorriqueño -15 veces elegido al Juego de Estrellas- perdió la vida en el día de Año Nuevo de 1972 en un accidente aéreo cuando procuraba llevar ayuda a las víctimas de un terremoto en Nicaragua.
El toletero dominicano, con 17 temporadas de experiencia en las mayores y siete veces ‘All-Star’, brindó ayuda financiera a 1.200 familias en su pueblo natal de Las Matas de Santa Cruz durante la pandemia de Covid-19. Ayudó a alimentar a 700 familias.
Después que un incendió destruyó la residencia de un amigo de la niñez, Cruz donó al pueblo un camión de bomberos, 80 uniformes y una ambulancia para transportar a las personas al hospital más cercano, situado a casi una hora de distancia.
Además, su Fundación Boomstick23 empezó el año pasado la construcción de un centro educativo y técnico, suministrando computadores para complementar la educación de los deportistas.
Cruz también organizó visitas de dentistas y optometristas a la clínica del pueblo para realizar exámenes y entregar medicinas y anteojos, en tanto que 500 pacientes recibieron servicios de odontología.
Se encargó de coordinar con las Grandes Ligas, la asociación de peloteros de las mayores y el fondo fiduciario del gremio la donación de 400.000 dólares a la República Dominicana para cubrir suministros médicos y alimentos durante la pandemia.
“Primero comenzamos con la clínica dental y el año pasado empezamos a preguntar cómo podíamos apoyar la salud mental y llevar a médicos de los ojos”, explicó Cruz. “Comenzamos a hacer todo al mismo tiempo. Incluso fuimos a las escuelas y dimos a los chicos todos los libros y material que necesitaban”.
Cruz fue nominado por los Mellizos, que le canjearon a Tampa Bay en julio. Es el cuarto pelotero de Minnesota que gana el premio, uniéndose a Rod Carew (1977), Dave Winfield (1994) y Kirby Puckett (1997), todos miembros del Salón de la Fama.
El abridor Jake Odorizzi, de los Astros, que tuvo a Cruz de compañero cuando ambos coincidieron con los Mellizos de Minnesota, dijo que era el pelotero ejemplar tanto dentro como fuera del diamante,
“Él pone el ejemplo con lo que hace con sus palabras, sus acciones y luego sale al terreno y produce”, manifestó Odorizzi. “Y es un gran humanitario fuera del terreno. Es una persona fenomenal y obviamente un gran ser humano. Estoy bien contento por él”.
Odorizzi subrayó que Cruz solo generaba una gran influencia tanto dentro del vestuario como en la comunidad, porque todos somos importantes para él”, subrayó Odorizzi. “Su manera de hacer crítica de algo que no estaba bien era mostrar el camino correcto para darle la solución que favoreciese a los más necesitados o perjudicados”.