MINNEAPOLIS, MN
La recuperación económica de EE.UU. se frenó el tercer trimestre del año, cuando el Producto Interior Bruto registró un crecimiento de sólo el 0,5%, debido entre otras razones al impacto de la variante delta de la COVID-19, la retirada de ayudas del Gobierno o los problemas en las cadenas de suministro.
Según el primero de los tres cálculos sobre la actividad económica del país, publicado este jueves por la Oficina de Análisis Económico (BEA, en sus siglas en inglés), el crecimiento del país fue de solo medio punto frente al 1,6% registrado en los tres meses anteriores.
Entre las cifras que explican esta ralentización económica está la del gasto del gobierno, que cayó un 4,7% respecto a los tres meses precedentes, mientras que la tasa de ahorro de los hogares se redujo del 10,5% al 8,9%.
Fue precisamente en septiembre cuando el Gobierno que preside Joe Biden puso al refuerzo de 300 dólares semanales en el subsidio por desempleo y también concluyeron gran parte de las ayudas a las pequeñas y medianas empresas.
Por su parte, el gasto de los consumidores, que en el país supone dos tercios de la economía, creció solo un 1,6% entre julio y septiembre, frente al 12 % del segundo trimestre del año.
El frenazo económico también responde a los problemas en las cadenas de suministro globales que han impedido que los negocios retomen la actividad normal tras el agudo golpe ocasionado por la pandemia.
No obstante, los analistas esperan un repunte económico en el último trimestre del año animado por la caída de los contagios de covid-19 por la expansión de la vacunación y la llegada de la temporada de vacaciones.
“Esperamos algo parecido a un rebote en el final del año, aunque solo sea porque los coches no serán un freno tan importante y
el impacto negativo de la variante delta será revertido”, indicó Paul Ashworth, economista jefe de la firma de inversión Capital Economics en una nota a clientes.
DESEMPLEO SIGUE A LA BAJA
Pese a la ralentización económica trimestral, este jueves se conocieron buenas noticias en el plano laboral con un nuevo descenso en la cifra semanal de solicitudes del subsidio por desempleo, hasta registrar un mínimo desde la llegada de la pandemia.
Este indicador bajó a 281.000 la semana pasada, por debajo de los 291.000 en la semana anterior, informó este jueves la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), con lo que el nivel de solicitudes sigue aproximándose al promedio de unos 205.000 trámites semanales antes de la covid-19.
El índice de desempleo, que se alzó a más del 14 % en abril de 2020, ha seguido disminuyendo progresivamente y se ubicó en el 4,8 % en septiembre.
INFLACIÓN SIGUE SIN DAR RESPIRO
La gran preocupación ahora es el inesperado y sostenido repunte de los precios en los últimos meses.
La tasa de inflación cerró el mes pasado en el 5,4 %, lo que supone niveles no vistos en Estados Unidos en más de una década.
Precisamente, este fin de semana la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, aseguró que no cree que se vaya “a perder el control” de la inflación en el país, aunque reconoció que espera que los precios se mantengan elevados hasta la mitad de 2022.
Asimismo, la Reserva Federal (Fed) de EEUU que apuntó a mediados de año que sería de carácter “transitoria” y ha reconocido ahora que la subida de precios podría durar más de lo anticipado.
De hecho, ha señalado que podría comenzar la retirada gradual del estímulo monetaria en su próxima reunión de noviembre, mediante la reducción en el volumen de su programa de compra mensual de bonos por valor de 120.000 millones de dólares.
El banco central estadounidense mantiene los tipos de interés en el rango cercano a cero y las citadas inyecciones de liquidez desde marzo de 2020, para apoyar a la economía tras el impacto de la pandemia.
En septiembre, la Fed rebajó sus previsiones de crecimiento económico hasta el 5,9 % este año, frente al 7 % estimado hace tres meses; mientras que elevó levemente las de inflación del 3,4 % al 4,2 % para final de 2021.