MINNEAPOLIS, MN. Por la Dra. Rita Roy
Estamos casi a mitad del invierno y aunque el enfoque de la salud sigue siendo estar a salvo de Covid, no podemos olvidar que esta es también la época del año en la que la temperatura del aire frío puede causar que los músculos y ligamentos que sostienen la espalda y la columna, junto con otras partes de su cuerpo como hombros y rodillas, para contraerse y tensarse. Según un estudio de la Comisión de Seguridad de Productos para el Consumidor de EE. UU., Las distensiones de espalda se encuentran entre las razones más comunes de hospitalización durante los meses de invierno y la temporada de vacaciones. Y seguramente todos desearíamos evitar un viaje no planificado al médico o al hospital, especialmente durante estos momentos.
Las personas deben ser conscientes de que el riesgo de lesionarse o volver a lesionarse tiende a aumentar en el invierno. Por lo tanto, es importante que todos, pero especialmente aquellos con antecedentes de problemas de espalda y columna, tomen precauciones. Como tal, aquí hay una breve lista de mis consejos fáciles de seguir para ayudarlo a mantener su espalda saludable durante el invierno y evitar lesiones.
- Estírate con regularidad. ¡El calentamiento no es solo para deportistas! Tener una rutina de estiramiento regular es importante si desea reducir el riesgo de lesiones e incluso acelerar la curación de una vieja. Los estiramientos simples de la espalda, como la postura del niño o el gato-vaca, pueden agregar fuerza y flexibilidad a su columna vertebral.
- Use calzado adecuado. Al igual que preparar las llantas de su automóvil, debe prestar atención a los zapatos que usa si planea caminar en un terreno nevado o helado este invierno. Además de asegurarse de que sus zapatos le queden bien (tenga cuidado de comprar en línea y pruébelos primero en la tienda, si es posible) y de tener suficiente aislamiento para mantener sus dedos calientes, invierta en un par de zapatos o botas que tengan suelas de goma antiadherente y peldaños en la parte inferior. Estos deberían ayudarlo a evitar resbalones y caídas, y así posiblemente sufrir una lesión en la espalda. Y cuando entre en el interior, quítese los zapatos mojados y cubiertos de nieve y cámbiese a calcetines o pantuflas cómodos y secos para no correr el riesgo de resbalarse por el suelo.
- Ten cuidado de tu entorno. Si planea pasar tiempo al aire libre, tenga en cuenta las superficies que lo rodean. Preste atención a los informes meteorológicos que exigen condiciones peligrosas. Es posible que una carretera o una acera heladas no se noten de inmediato, por lo que es mejor dar pasos pequeños, no caminar demasiado rápido y evitar cargar objetos voluminosos o pesados como bolsas de la compra. Utilice objetos grandes y estacionarios a su alrededor, como pasamanos, un árbol o un vehículo, para estabilizarse si se siente en riesgo de caerse. Comprenda que las nevadas pueden ocultar cosas que podrían hacer que se tropiece, como rocas o escalones, así que esté atento a lo que está directamente frente a usted.
- Mantenerse activo. El invierno trae consigo las secuelas de la temporada navideña que, para algunas personas, se caracteriza por una gran cantidad de comida decadente combinada con mucho tiempo para sentarse. Para otros, la depresión estacional asoma su fea cabeza, lo que dificulta incluso las actividades básicas y cotidianas. Si bien el pavo, las tartas y el chocolate son deliciosos alimentos básicos para las fiestas, el consumo excesivo puede provocar un aumento de peso no deseado, lo que a su vez tiene el potencial de agregar presión a una espalda sensible. Asegúrese de contar con tiempo entre comidas para hacer un poco de ejercicio ligero y mantener su cuerpo ágil.
- Pero además, ¡no te excedas! Muchos de nosotros nos involucramos en trabajos físicamente agotadores una vez al año al aire libre durante el invierno, ya sea colgando luces y adornos navideños o quitando nieve. Estos trabajos ocasionales pueden resultar peligrosos porque pueden requerir que nuestros cuerpos se muevan de maneras a las que quizás no estén acostumbrados. Palear la nieve, en particular, puede ejercer una enorme presión sobre la espalda con todo lo necesario para agacharse y levantarse. Es importante utilizar la técnica y el equipo adecuados siempre que sea posible, y darse suficiente tiempo para tomar descansos y descansar cuando realice una actividad tan extenuante.
- Utilice siempre el cinturón de seguridad. Con suerte, este es uno de los consejos más obvios, ¡pero vale la pena mencionarlo! Casi una cuarta parte de los accidentes automovilísticos relacionados con el clima ocurren durante el invierno, y casi 76,000 personas resultan heridas en accidentes que ocurren en carreteras nevadas o fangosas. El dolor de espalda o las lesiones se informa comúnmente incluso después de choques de guardabarros a baja velocidad, principalmente debido al hecho de que la mayoría de las veces nuestros cuerpos no tienen la oportunidad de prepararse para el impacto repentino. Tener su cinturón de seguridad bien abrochado puede minimizar ese movimiento inesperado… además de, ya sabe, salvarle la vida.
Al ser deliberados y siempre teniendo en cuenta nuestra salud corporal, todos deberíamos poder disfrutar del invierno de manera segura. Todos deberíamos ser conscientes de las limitaciones de nuestro cuerpo, pero al observar este puñado de consejos, debería poder navegar esta divertida temporada de invierno sin dolor ni lesiones.