MINNETONKA, MN
No todo lo que brilla es oro, dice el dicho, y no todas las personas que hablan español son de la misma cultura.
Cuando vine a vivir a Estados Unidos hace un buen tiempo atrás había menos conciencia acerca de los latinos debido a que aún eran una minoría dentro de las minorías. En esos tiempos la gente no latina casi siempre me catalogaba como mexicana. Estoy muy orgullosa de ser latina, y amo a todos mis hermanos latinos procedentes de otros países, pero también quiero ser identificada como lo que soy, —guatemalteca. Esta es la polémica que muchos latinos vivimos a diario en este país al que hemos llegado con ansias de estudiar, trabajar, y salir adelante.
Unos años después durante mi segunda carrera decidí lanzar una compañía dedicada a educar al público culturalmente a fondo y usar el mosaico de sabores latino como un conducto para hablar de razas, etnias, matices, coloquialismos, idiomas, arte, religión y sincretismo, cocina y antropología e historia, comida fusión, y muchos otros temas más, con el fin de lograr un mejor entendimiento y apreciación cultural latino. Mi labor continúa aún con más apogeo ahora que somos la minoría número uno, sin embargo, es necesario seguir aclarando las razones de los stereotipos que persisten.
Hace unos días dí una plática en una empresa local para celebrar el Mes Hispano. Curiosamente muchas veces las personas que me contratan son latinos o ejecutivos que tienen un interés especial en Latinoamérica. A través de un menú gourmet de siete platillos tradicionales acordados de antemano con mi cliente, enfoqué mi presentación en ingredientes y sabores típicos de cierta región así como la razón de las similitudes y diferencias entre ellos. A la vez, logré interacción con la audiencia para que compartieran acerca de sus raíces. Entre técnicas saludables de cocina y anécdotas personales de varios países, logramos sacar a la luz riquezas culturales que otras personas desconocen.
Para darle más sabor a mi charla de hoy, les comparto una receta fusión de mi creación la cual me permite hablar de historia de origen, evolución, e innovación en la cocina actual.
La Boquita de Amalia
AmaliaLLC.com
Receta original de la chef Amalia Moreno-Damgaard que consiste de una entrada de capas de hummus a lo latino, chicharrón mexicano, guacamole al estilo de Guatemala, y curtido crudo con limón y chile como se hace en Baja.
Cuando las recetas tradicionales latinas llegan a Estados Unidos sufren una metamorfosis casi inevitable por muchas razones, -escasez de ingredientes, preferencias personales, adaptaciones culturales, entre otras. Esta receta une sabores que seguramente son familiares para muchos pero que tal vez no los habían experimentado de esta forma. Esta es una receta fusión de sabores latinos y árabes los cuales no son ajenos a nuestro paladar ya que llegaron a latinoamérica a través de España.
Sirve a 2 personas
- Hummus Latino: moler en procesador hasta formar un puré suave: ½ taza de garbanzos de lata, sin líquido; ½ taza de pasta de tahini pura de lata (pasta de ajonjolí); 1 taza de tomates Rotel en lata picantes; 1 diente de ajo picado; y ½ cdita de cada una de las siguientes especias en polvo: tomillo, comino, pimentón, lemon pepper. Sal y pimienta al gusto.
- 1 taza de chicharrón del día, quebrado en pedacitos con un martillo de metal
- Guacamole guatemalteco: hacer puré: 1 aguacate; el jugo de 1 limón; 2 cditas cebolla picada fina; ¾ cdita orégano; sal al gusto.
- Curtido como el de Baja: mezclar: 1 taza de repollo con el jugo de un limón; 1 cda de cilantro picado; 1 chile serrano en rodajas finas; sal al gusto.
- Ensamblaje de la Boquita (distribuya en partes iguales): Ponga una capa de hummus primero; siga con el chicharrón; luego agregue el guacamole; y por último, el repollo.
Usted puede encontrar mas información sobre la Chef Amalia y mas recetas en su sitio web http://amaliallc.com/ .