MINNEAPOLIS, MN.-
Una de cada cinco empresas mexicanas, el 19,7 %, reportan un impacto positivo reciente por el fenómeno de la relocalización de cadenas o “nearshoring” y por la fortaleza de la demanda, según reveló este jueves un informe del Banco de México (Banxico).
En su “Reporte sobre las economías regionales abril-junio 2023”, el banco central encontró, además, que el 9,3 % de las compañías a nivel nacional informan de un aumento en la producción, venta o inversión por la reubicación de las cadenas de valor de otros países a México.
En las manufacturas, el 14,9 % de las compañías señala un incremento de la inversión planeada, el 11,9 % en la inversión para ampliar la capacidad, el 11,8 % en el valor de ventas pactadas con empresas extranjeras, el 11,6 % en la producción u operación, y el 9,7 % en el número de trabajadores.
“Diversos factores han incentivado una reconfiguración de las cadenas globales de producción que podría favorecer a México a través de la reubicación de la producción hacia el país”, indicó el organismo autónomo en el documento.
El “nearshoring” es un fenómeno que consiste en reubicar las cadenas de producción de otros países, en particular de Asia, a regiones más cercanas a los grandes mercados, como en el caso de México con Estados Unidos.
La tendencia se ha agudizado tras la pandemia de covid-19 y la guerra comercial entre China y Estados Unidos.
México es uno de los países más beneficiados, y el banco Santander ha estimado que el “nearshoring” podría impulsar un crecimiento adicional de 8 % en el producto interior bruto (PIB) del país en los siguientes seis años.
“Para aprovechar las oportunidades que representa el proceso de relocalización, y ante los riesgos que enfrentan las economías regionales, especialmente el de una mayor desaceleración externa, es importante continuar fortaleciendo las fuentes internas de crecimiento y generar condiciones que propicien la inversión”, comentó ahora Banxico.
El banco central también destacó “la resiliencia” de la economía mexicana, tras el crecimiento trimestral de 0,8 % e interanual de 3,6 % en el segundo trimestre.
“La actividad económica en México se mantuvo resiliente y se expandió a un ritmo similar al del trimestre previo. Esta resiliencia se puede asociar con el buen comportamiento del gasto interno en general”, expuso el organismo.