MINNEAPOLIS, MN.-
Nueve legisladores republicanos buscan ser elegidos como el candidato republicano para la presidencia de la Cámara Baja de Estados Unidos, un puesto vacante desde el pasado 3 de octubre.
Entre los aspirantes, que tenían hasta el mediodía de hoy para presentar su candidatura, está el número tres del partido republicano en la Cámara Baja Tom Emmer.
El legislador, que representa al sexto distrito de Minnesota, ya cuenta con el apoyo de Kevin McCarthy, el anterior presidente de la Cámara Baja, también republicano, quien fue revocado en una histórica votación a inicios de mes.
En una entrevista con la cadena NBC este domingo, McCarthy dio un espaldarazo a Emmer, asegurando que tiene las habilidades “necesarias para el puesto”.
Sin embargo, no está claro aún si los congresistas del ala más radical del partido republicano, miembros del grupo legislativo Freedom Caucus (caucus de la libertad), vayan a dar su apoyo a Emmer, de acuerdo con fuentes consultadas por la cadena CNN.
Más aún teniendo en cuenta que un representante de la bancada de los ultraconservadores, Byron Donalds, también se postuló para el puesto de candidato republicano.
Donalds, uno de los solo cuatro congresistas afroamericanos dentro de los republicanos en la Cámara de Representantes, dijo el pasado viernes que sus prioridades, de ser elegido serían “asegurar la frontera, aprobar presupuestos responsables para el gobierno” y promover una perspectiva conservadora en el hemiciclo.
Los otros siete legisladores que desean alcanzar la nominación republicana son: Jack Bergman, Kevin Hern, Mike Johnson, Dan Meuser, Gary Palmer, Austin Scott y Pete Sessions.
Con los nombres ya sobre la mesa, los republicanos de la Cámara Baja celebrarán una reunión a puerta cerrada para discutir a quién elegirán como candidato.
Esta nueva ronda de consultas y votaciones llega después de que el legislador Jim Jordan no obtuviera los suficientes votos para hacerse con la candidatura el pasado viernes.
La decisión de retirar la candidatura de Jordan, cercano al expresidente Donald Trump (2017-2021), se tomó tras una reunión interna de los conservadores después de que Jordan solo lograra este viernes 194 votos de los 215 necesarios. Veinticinco de sus colegas apoyaron a aspirantes que ni siquiera se habían postulado.
La Cámara Baja lleva más de dos semanas sin presidente, después de que McCarthy fuera destituido tras una moción en su contra presentada por el radical Matt Gaetz, de su propio partido.
En el bando demócrata aspira al puesto de presidente el líder de la minoría, Hakeem Jeffries, que en las dos primeras votaciones logró todo el apoyo de los demócratas, pero es insuficiente también para ser elegido.
La presidencia interna está en manos del conservador Patrick McHenry, designado por McCarthy, pero mientras no haya un “speaker”, tal y como se conoce ese puesto en inglés, no se pueden aprobar nuevas resoluciones o proyectos de ley.
La Cámara Baja está por tanto bloqueada en un momento en que aún se deben aprobar los presupuestos para el actual año fiscal y en que el presidente estadounidense, Joe Biden, acaba de pedir al Congreso aprobar una partida de más de 100.000 millones de dólares que incluye una ayuda de 14.300 millones para Israel y un nuevo paquete para Ucrania por 61.400 millones.