DALLAS, TX
La invitación era tentadora y aunque ya planeaba ir a Chicago en esa misma semana decidí extender la actividad pre-mundialista para asistir a este juego, México se enfrentaba en Dallas Texas al Ecuador por la tarde del sábado 31 de Mayo en carácter de última preparación para ambos antes de ir al Mundial de Fútbol Brasil 2014.
Es común ver al equipo nacional de México jugar en los Estados Unidos, pero hoy se enfrentaba a Ecuador, una de las escuadras que más representan en número a la comunidad Latina de Minnesota, según el Consulado General del Ecuador, existen al rededor de 36, 000 Ecuatorianos en Minnesota mientras que hay un poco mas de 176,000 por México.
El Ecuatoriano es gran aficionado al fútbol, apasionado de sus colores y entusiasta al tener hoy día a un gran equipo, el cual obtuvo su pase al Mundial jugando muy bien y sin mayores complicaciones. Y aunque en el estadio sería el verde el color mas predominante, el Ecuatoriano de Minnesota hoy viaja en gran número a ver a su selección .
El marcador previo decía un empate de triunfos, en el avión, 10 personas a 1 a favor de Ecuador, en el estadio las cosas fueron muy diferentes. Ya en Dallas, en el AT&T Park que por cierto es un estadio moderno, lujoso, impresionante, comenzamos a ver las camisetas verdes en gran medida. Solo un cinco por ciento de los aficionados pintaban de amarillo, todo, todo era verde.
Comenzó el juego y volví a ver la ola, toda verde, tomando la ciudad, el estadio. Los himnos de ambos países nos recordaron lo oficial del cotejo y lo que estaba en juego para este juego de lleno total, todo verde, y con tonos de amarillo. Luchaba por contener la emoción, después de todo estaba ahí para cubrir el juego, no para vivirlo como aficionado.
Comenzó el juego y no pude evitar el exclamar ” ¡no, no, no, no!” al ver frente a mi al mejor jugador Mexicano lesionarse en este partido de preparación. en la sala de prensa, un reportero Ecuatoriano exclamaba al teléfono también, “le han roto la pierna a Luis Montes, le han roto la pierna, esta fuera del mundial”, incrédulo escuchaba y reprobaba esta afirmación, pensaba era muy temprano e infundado el decirlo. Lo demás ya lo sabemos…
La gente quería ver fútbol, no hubo repetición del incidente en la gigantesca pantalla, las cámaras del estadio circulaban por las tribunas al sonido de canciones alegres, nadie supo entonces el resultado de esta fatal jugada. El ánimo continuo, aunque la intensidad del juego declino, ahí si los jugadores recordaron que había que cuidarse, que un mundial les esperaba. Continuaron las acciones y México logró llevarse por goles el partido, cumpliendo con el compromiso y con un público de 84,500 aficionados, 95 por ciento de ellos en verde.
Al final, podremos decir que México ganó el partido, pero perdió, perdió, mucho más!