MINNEAPOLIS, MN.-
El expresidente de Estados Unidos y candidato republicano Donald Trump apareció este martes por sorpresa en la segunda jornada de la Convención Nacional de su partido a tiempo para escuchar los discursos de sus principales rivales en las primarias: Nikki Haley y Ron DeSantis.
Haley, exembajadora estadounidense en la ONU, fue la última rival del magnate neoyorquino en las primarias y, cuando se retiró derrotada el pasado marzo, se negó a respaldar a Trump.
Sin embargo, luego cambió de opinión, pidió el voto para el expresidente y liberó a sus delegados para que ratificaran la nominación de Trump en la convención.
DeSantis, gobernador de Florida y quien se retiró de la carrera republicana antes que Haley, transmitió rápidamente su respaldo a Trump cuando tiró la toalla, a pesar del desprecio que el magnate había expresado hacia él.
Trump llegó a su tarima por segundo día consecutivo en medio de una gran ovación y todavía con una venda en la oreja derecha por la herida que sufrió en el intento de asesinato del pasado sábado en un mitin en Pensilvania.
El candidato de los republicanos a la Casa Blanca apareció poco antes de que Haley y DeSantis suban al escenario para expresarle su firme apoyo.