MINNEAPOLIS, MN.-
La pareja cubana de voley playa formada por Noslen Díaz Amaro y Jorge Luis Alayo Moliner se impuso por 2-0 en el estreno olímpico, y en apenas cuarenta minutos, a los estadounidenses Milas Partain y Andrés Benesh, en un partido marcado por la lluvia y el icónico escenario de los Campos de Marte con la Torre Eiffel de testigo.
Ocho años después, Cuba volvió a estar presente en unos Juegos Olímpicos en voley playa. En aquella ocasión, Sergio González y Nivaldo Díaz, en Río 2016, ocuparon una histórica quinta plaza que mejoró el séptimo puesto de Juan Rosell Milanés y Francisco Álvarez Cutiño en Atlanta’96.
Precisamente Cutiño, como entrenador, es en parte el artífice de los éxitos de Noslen Díaz Amaro, de 21 años, y Jorge Luis Alayo Moliner, de 23, la pareja de jugadores cubanos que ha devuelto al país caribeño a la élite del voley playa. De hecho, iniciaron la fase de clasificación en enero de este 2024 en el puesto 33 y acabaron en la plaza 17 con el billete hacía París.
En el estadio de los Campos de Marte, en un inmejorable lugar situado a los pies de la Torre Eiffel, Díaz y Alayo debutaron en los Juegos Olímpicos de París ante Milas Partain y Andrés Benesh.
Cuba contra Estados Unidos. Dos países que, más allá de la rivalidad deportiva, también viven en un conflicto político permanente que dura muchas décadas debido principalmente a las políticas de bloqueo de los estadounidenses hacia la isla.
La pareja estadounidense comenzó jugando mejor y fue por delante gran parte del primer set hasta que los cubanos lograron dar la vuelta y ponerse 16-17 en el momento clave. A partir de ahí, los jugadores caribeños fueron a más, se mostraron muy seguros en la recepción, fiables en los saques y aguerridos en ataque. Terminaron ganando los dos sets por un idéntico 18-21.
Durante el partido, los cubanos conquistaron a la afición parísina, que comenzó fría desde sus asientos mojados por la lluvia y acabaron animándoles, en parte por los continuos guiños que fueron haciendo la grada para que les aplaudieran y les animaran al celebrar los puntos al ritmo de la música que fue pinchando el español Tony Rojas, encargado de la ambientación de la instalación.
“Es algo maravilloso ganar a Estados Unidos en un escenario tan inmenso, de lo más grande que hemos jugado. Además, sentir el apoyo del público en un día lluvioso motiva”, dijo Jorge Luis Alayo, feliz de ganar a esta pareja estadounidense por primera vez en su tercer enfrentamiento.
“Ganar el primer partido de los Juegos a Estados Unidos es algo maravilloso. Hemos sentido la responsabilidad de hacerlo bien. Como atleta teníamos el sueño de estar en los Juegos y ahora vamos a darlo todo para estar satisfechos cuando acabemos”, confesó Noslen Díaz Amaro.
Cuba está enmarcada en el Grupo D de los Juegos Olímpicos de París con Estados Unidos, Brasil y Marruecos.