SAINT PAUL, MN
El Centro de Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos ha confirmado este miércoles el vínculo entre el virus del Zika y defectos de nacimiento como la microcefalia. “Hemos confirmado ahora lo que las crecientes pruebas sugerían. Ahora está claro que el virus causa microcefalia”, así lo dijo el director del CDC, Tom Frieden.
De acuerdo a los resultados de un estudio, los expertos del CDC concluyen que “existe una relación causal entre la infección prenatal del virus del Zika y la microcefalia y otros graves defectos cerebrales fetales”.
Según subrayó el CDC en un comunicado, la confirmación del vínculo entre el virus y defectos como la microcefalia no se debe a una evidencia única que proporcione una prueba concluyente. Pero se ha llegado a esta conclusión —tan segura que los expertos estadounidenses han decidido ser los primeros en anunciarla— tras revisar los cada vez más numerosos estudios sobre el tema, evaluándolos mediante “criterios científicos establecidos que apoyan las conclusiones de los autores”.
Según el experto, el próximo paso será lanzar nuevos estudios para determinar si los niños nacidos con microcefalia de madres infectadas de Zika “es la punta del iceberg de lo que podríamos ver sobre efectos dañinos en el cerebro y otros problemas de desarrollo”, advirtió.
Además, algunos estudios han demostrado que el virus se queda más tiempo circulando en mujeres embarazadas que en las que no están gestando, aunque por el momento no hay conclusiones sobre qué efectos puede tener esto. “Muchas preguntas siguen abiertas, incluido el espectro de defectos causados por la infección prenatal del virus del Zika, el grado de riesgos relativos y absolutos entre los fetos cuyas madres se infectaron en momentos diferentes del embarazo y factores que podrían afectar el riesgo de la mujer a tener un resultado adverso de la gestación o del parto”.
La confirmación de este vínculo no significa, puntualizó también el CDC, que toda mujer embarazada e infectada con Zika vaya a tener un bebé con problemas de malformación, tal como muestran los muchos casos de nacimientos de bebés sanos. Pero para lo que sí sirve es para reforzar las medidas de prevención, dijo Frieden.
Por el momento sin embargo, no se recomendaran hacer modificaciones a las recomendaciones para mujeres embarazadas, a las que aconsejan evitar en la medida de lo posible viajar a zonas donde hay virus del Zika y protegerse de las picaduras si no pueden evitar ese viaje o viven en zonas de riesgo. Si la pareja de la embarazada ha viajado a una zona con el virus, se le recomienda que se abstenga de mantener relaciones sexuales durante la gestación o que lo haga con preservativo.
Hasta el momento, no se han registrado casos del virus del Zika en los Estados Unidos. Todos los casos han sido o bien importados (personas que se infectaron al viajar a un país donde está presente el virus) o por transmisión sexual. Los especialistas tampoco ven la posibilidad de que la posibilidad de ser contagiado a través de lapidara de un mosquito es remota para los estados del norte de los Estados Unidos incluyendo Minnesota.
Esta situación ha facilitado el estudio de las posibles implicaciones de la infección del virus, puesto que permitió descartar en las mujeres embarazadas afectadas otros factores que sí se dan en zonas de Zika.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS), brazo regional de la OMS, dijo que el estudio del CDC “adelanta significativamente nuestra comprensión del vínculo causal entre el virus del Zika y las malformaciones fetales que se han observado”.