MINNEAPOLIS, MN.-
Un grupo de ingenieros mexicanos logró un acuerdo con un fabricante de piezas de automóviles y dos agencias de contratación a los que demandó por atraerlos a Estados Unidos con falsas promesas de trabajo y someterlos a salarios bajos, según documentos judiciales publicados este lunes.
En octubre del año pasado, cinco ingenieros presentaron en un tribunal federal de Georgia una demanda contra el fabricante SL Alabama LLC y los contratistas GB2G Inc., mejor conocido como Allswellm, y SPJ Connect Inc. por engañarlos con las promesas de trabajo.
En la querella legal, los demandantes alegan que el caso involucra tráfico laboral, fraude, discriminación, incumplimiento de contrato y violaciones salariales contra trabajadores extranjeros de ascendencia mexicana que fueron explotados como parte de un esquema ilegal de mano de obra barata en la planta de producción de autopartes de SL en Alabama.
Los ingenieros fueron traídos a los EE.UU. a través del programa de visas comerciales del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que permite contratar mano de obra altamente calificada, pero fueron obligados a trabajar en la línea de montaje con menores salarios y amenazados con ser deportados. En la demanda, los trabajadores dijeron que el empleo y las condiciones que les brindaron no cumplían con las ofrecidas en las cartas de contratación.
Uno de los ingenieros, identificado solo como Luis, dijo al periódico The Atlanta Journal-Constitution, que la vivienda que Allswell le había prometido resultó ser un lugar en el piso de una casa compartida con otros siete trabajadores.
Los ingenieros también fueron obligados a trabajar en la línea de ensamblaje en largos turnos con salarios tan bajos como 11 dólares la hora.
El juez federal Timothy C. Batten aprobó el acuerdo de forma preliminar el viernes pasado, acordando un pago compensatorio a los trabajadores.