MINNEAPOLIS, MN
Un líder muy importante y de alto rango en el departamento de policía de Minneapolis se encuentra bajo investigación por parte de la Junta de Supervisión Civil de la propia ciudad, según declaró un oficial del cuerpo de policía este lunes 2 de mayo de 2016.
El comandante en jefe del cuarto precinto de la policía de la ciudad, Michael Friestleben, se encuentra bajo control y observación del grupo de Revisión de Conducta de los Oficiales de Policía, ha dicho el presidente del sindicato de policías, el teniente Bob Kroll, quien no ofreció detalles sobre la naturaleza de la investigación.
El vocero de la policía de Minneapolis, John Elder, confirmó que Friestleben se encuentra bajo condición de ausencia laboral hasta que se le comunique lo contrario, pero igualmente ha declinado el comentar sobre la naturaleza de la acción.
Friestleben creció en el precinto del norte de Minneapolis al que fue nombrado para dirigir apenas en el 2015. Incluso antes de su promoción, Friestleben se encontraba siempre en el frente de acción en los esfuerzos que se desarrollaban en el cuerpo policiaco a fin de mejorar las relaciones entre los miembros de la comunidad y el departamento de policía.
Esa tarea implicaba muchas ocasiones el participar en muchas y muy diversas reuniones de grupos comunitarios, los cuales ocurrían en ocasiones en forma casi simultánea en una sola tarde durante el día. Friestleben también participaba en llamar de puerta en puerta al lado de activistas comunitarios en el vecindario de Jordan.
Las tensiones entre la policía y la comunidad se calentaron al extremo el año anterior en el área del 4º precinto policiaco, cuando un oficial blanco disparó sobre Jamar Clark provocando su muerte. Clark era un hombre negro de 24 años de edad, y recibió los disparos que cegaron su vida en las cercanías de la estación del precinto. Como consecuencia de los disparos que mataron a Clark, grupos de manifestantes acamparon a las afueras del precinto y lo hicieron por casi tres msemanas.
Kroll indica que la moral de los policías en el precinto se ha encontrado en un nivel muy bajo desde el momento en el que las instalaciones fueran ocupadas. Y declaró que habría recibido muchas quejas sobre Friestleben por parte de un buen número de oficiales de policía.
“Me encontraba rebasado con llamadas y quejas sobres la forma en la que el inspector se acercaba a los oficiales, a lo largo del fin de semana pasado,” dijo Kroll.
Entre otras cosas, Kroll dijo que los oficiales indicaban que Friestleben empleaba tonos y adjetivos despectivos en contra de ellos. Kroll dijo también que algunos de los oficiales le dijeron que estarían considerando solicitar ser transferidos a otro precinto policiaco, para evitar dichas circunstancias. O bien, solicitar que Friestleben fuese despedido.
Kroll, sin embargo, indicó que “el jefe no puede remover a nadie por motivos de baja moral, no creo.” Finalizó diciendo que Friestleben es un empleado nombrado y que no se encuentra cubierto por el contrato firmado por el sindicato. Dijo así mismo que la investigación podría tomar entre uno y dos meses.
