MINNEAPOLIS, MN
Este lunes, 18 de julio de 2016, da comienzo la Convención Republicana en la ciudad de Cleveland, en el estado de Ohio. Y ya desde una semana antes, y en el contexto de las preparaciones que han tenido lugar, las protestas han sido cotidianas, con una serie de protestas en contra de la nominación de Donald Trump.
La policía local se encuentra bajo tensión ante el incremento de armas entre simpatizantes y opositores a Trump, quienes se han mostrado públicamente con armas en sus manos. A ello se suma que en los días recientes se han registrado una serie de actos violentos en contra de ciudadanos y policías, lo cual ha sido parte del discurso de diversos miembros del partido republicano, en el sentido de temer que tengan efecto actos terroristas en contra de dicho partido, y durante el proceso en el que se denomine al candidato presidencial del partido del elefante.
Este lunes los delegados republicanos se darán cita para discutir, y muy probablemente nombrar a Trump, y su compañero de fórmula, el gobernador de Indiana, Mike Pence, como elegido para ser candidato a vicepresidente en las boletas electorales. Pese a que existen puntos que, en la arena política, han significado para Pence, actuar en contra de la filosofía de Trump, y que ha sido empleado para criticar profundamente a Hillary Clinton, incluyendo el haber apoyado la guerra en Iraq.
Pence aparece como compañero de fórmula en un contexto en el que el llamado Tea Party, se posiciona fuertemente en la carrera por la nominación, en tanto que Pence es un ultra conservador, quien ha hecho campaña abiertamente en contra de los derechos de comunidades GLBTQ, y que se ha expresado abiertamente en contra de la inmigración indocumentada. Sin embargo, algunos aspectos que no concuerdan con los discursos de Trump, han servido para que éste se proclame como promotor de la democracia, y que el disentir será parte de su interacción con Pence.
Mientras tanto, algunos representantes del partido republicano amenazan con participar en la convención bajo protesta, y con la firme intención de cambiar el resultado de la misma, una vez que han expresado estar abiertamente en contra de la candidatura de Trump. Algunos de ellos incluso han expresado públicamente que votarán en favor de Clinton, con el fin de evitar que el multimillonario llegue a ocupar la casa blanca como residencia oficial.
En su favor, la más reciente encuesta de opinión, luego de que finalizara la investigación del FBI en torno a los correos electrónicos de Hillary Clinton, indica que la ex–secretaria de estado mantiene una ventaja sobre su potencial contrincante republican, con 42% frente al 37 %. La sorpresa la ha dado el representante del partido libertario, Gary Johnson, hombre de negocios y ex-gobernador del estado de Nuevo México, y quien es también ex-militante republicano.
Y es precisamente Johnson, quien podría emerger como un caballo negro en la convención republicana, como propuesta para frenar la candidatura de Trump. En este momento, el apoyo que se ha mostrado en favor de Johnson es sorprendente, y no se habría registrado tal comportamiento en el partido libertario en el pasado.
Otra sorpresa es la presencia de Jill Stein, quien busca el apoyo del partido verde, y que ha atraído interés de republicanos disidentes y acaso de simpatizantes de Bernie Sanders que no apoyarán a Clinton. Stein se ha posicionado en las encuestas con el 5% de las preferencias electorales, lo cual puede ser también un potencial fiel de la balanza en caso de que Trump sea nominado esta semana en Cleveland.
Así, Cleveland, una ciudad que ha sido en el pasado una cita en modelos de desarrollo económico, brindará un espacio para que la convención republicana tenga lugar, y en donde Donald Trump intentará unificar a un partido tan fracturado como la ciudad misma. Una ciudad en la que estarán ausentes los expresidentes George H.W. Bush y George W. Bush, así como Mitt Romney, John McCain, y la misma Sarah Palin, o el senador Marco Rubio, dentro de una larga lista de ausentes, indicando un serio problema para el partido.
