SAINT PAUL, MN
Luego de que se cancelara en agosto una sesión extraordinaria en la que se planeaba llegar un acuerdo en los recursos para construir la línea suroeste del tren ligero, el gobernador Mark Dayton acordó abrir una nueva sesión y la volvió a cancelar de nuevo.
Por Karla Rentería
Alegando que “el tiempo para la sesión legislativa especial se ha agotado,” Dayton le escribió ayer al Representante de la Cámara, Kurt Daudt para decirle que “hay solo 46 días a partir de hoy y hasta el día de la elección en noviembre para que los demócratas y republicanos puedan resolver sus diferencias.”
Ambas partes esperaban llegar a un acuerdo en una sesión extraordinaria para pasar un paquete de deducción de impuestos y aprobar un 1 billón de dólares para la construcción de proyectos públicos.
Pero la propuesta de la construcción de una línea del tren ligero para conectar los suburbios al suroeste de Minneapolis, propuesta que apoyan los demócratas pero no los republicanos, les ha impedido llegar a un acuerdo.
En un comunicado, Daudt asegura que Dayton y otros demócratas están huyendo de cosas que podrían traer muchos beneficios a Minnesota, incluyendo una reducción de impuesto, una autopista y otros proyectos de infraestructura.
“Los republicanos han iniciado cada junta y discusión en los últimos dos meses para pasar la propuesta de reducción de impuestos y fondos para proyectos de infraestructura critica como la autopista 23, 14 y otros tantos en el estado,” dijo Daudt.
Hay dos cosas importantes que están pendientes: pasar una factura en impuestos por 300 millones y que fue rechazada por Dayton por un error y la otra, pasar una medida para pedir prestado un 1 billón de dólares o más para proyectos de infraestructura. Dentro de la propuesta también se incluye un estadio para las ligas mayores de soccer en Saint Paul.
Aunque los legisladores resolvieron el problema del dinero, Dayton demandó nuevos fondos para sus prioridades, incluyendo la ampliación del hospital psiquiátrico en Saint Peter.
Tanto los senadores demócratas como los republicanos, desean que se lleve a cabo una sesión especial para que sus legisladores titulares puedan usar la aprobación de las cuentas de impuestos e infraestructura como logros de campaña en las próximas elecciones.