EDEN PRAIRIE, MN
De acuerdo a los resultados de las encuestas que se dieron a conocer durante el periodo de elecciones el pasado mes de noviembre, las personas que llevaron a Trump a la Casa Blanca fueron los adultos entre 45 y 65 años (53 por ciento) y serán precisamente ellos, quienes se vean más afectados de aprobarse el presupuesto.
El plan de los Republicanos de remplazar la Ley de Cuidado Accesible golpeará severamente a los adultos mayores que no han alcanzado la edad para tener acceso a Medicaid. Es decir, 3.4 millones de estadounidenses que se han inscrito a los programas gubernamentales, muchos de los cuales reciben subsidios a través del programa implementado por el presidente Barack Obama.
Obamacare beneficia a las personas con ingresos bajos y clase media con una tarifa de impuestos fija que no toma en cuenta ingresos o precios de seguros locales.
Los expertos en salud temen que los adultos mayores terminen comprando planes con coberturas más bajas y deducibles más altos porque eso es lo que podrán pagar, ya que el plan de los Republicanos es remplazar los subsidios de la Ley de Cuidado Accesible. Además de eso, les permitirá a las aseguradoras cobrarles cinco veces más de lo que le cobran a los clientes más jóvenes.
Otro de los programas que sufrirá modificaciones y que afectara a la población de escasos recursos, es la reducción en el presupuesto para el Bloque de subsidios para el desarrollo Comunitario del cual dependen 5 mil grupos del programa Meals on Wheels.
“Este es un programa de 3 billones de dólares que comenzó durante la administración Ford que otorga a los estados y ciudades más flexibilidad para combatir la pobreza, el cual usa voluntarios para entregar comidas calientes a los ancianos a lo largo y ancho del país.
Y al razón es porque la mayoría de los programas de Meals on Wheels reciben la mayor parte de su presupuesto a través de la Administración de Vida Comunitaria, una agencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos que ayuda los ancianos y discapacitados. Esta agencia tiene 227 millones destinados para “servicios de nutrición a domicilio.”
El programa es tan popular, que el año pasado fue renovado por el Congreso sin que nadie se opusiera.
Y aunque la administración no señalara específicamente a este programa, tiene contemplado reducir en un 16 por ciento el presupuesto para Salud y Servicios Humanos.
