SAINT PAUL, MN
Después de sentir que se merecía mucho más en los tres primeros partidos de esta serie de playoffs contra los Blues de St. Louis, los Wild con un juego contundente y ordenado por la noche del miércoles lograron una gran victoria por 2-0 en el Scottrade Center.
Al parecer el día libre que recibieron el lunes y una cena de equipo la noche anterior que incluyó ver otros juegos de playoffs de la NHL y disfrutar de algún Ping-Pong competitivo, los Wilds jugaron con una actitud “ahora-o-nunca” y finalmente se compensó el duro trabajo que se ha llevado a cabo en esta eliminatoria y a lo largo de la temporada.
“Hicimos lo que teníamos que hacer para ganar”, dijo el veterano Zach Parise. “No siempre fue el hockey más bonito, pero hicimos lo que nos propusimos hacer, que fue venir aquí y conseguir una victoria. Ese fue el primer paso”.
Por primera vez en la serie, el portero de los Blues, Jake Allen, que entró con 114 salvadas en 117 tiros, dejó de ser casi imbatible cuando Charlie Coyle y Martin Hanzal anotaron. En el otro equipo (Wild), Devan Dubnyk tuvo una actuación enorme durante el partido al alcanzar 28 salvadas para su segunda eliminatoria de playoff de la carrera.
Con este resultado la serie no ha quedado resuelta y ahora hay que preparar el siguiente partido del día lunes, donde la consigna del equipo de los Wilds sigue siendo ‘Prohibido Perder’.