MINNEAPOLIS, MN
Seguramente Peterson quiere jugar, después de todo eso es lo que el hace. Muchos hoy piensan que el jugador ya jugó lo que le permitieron jugar esta temporada, que esta se ha terminado para el y que aunque los Vikingos lo quisieran, seria un error el reincorporarlo al equipo.
Cuando todo comenzó, nos mantuvimos en silencio. Y es que la intensa controversia, se escuchaba en todos lados y se volvía casi imperativo el hablar del jugador y sus líos con la ley en Texas. Y ahora, los nuevos líos y los nuevos rumores. La imagen de este jugador ha sido públicamente deteriorada, primero por sus actos y luego a causa del círculo mediático que se ha formado alrededor de ellos.
Sin ir muy lejos, ahí mismo cuando el jugador piso corte, existía en ese lugar una multitud de abogados y o trabajadores administrativos que hacia imposible el visualizar que realmente estaba pasando. Era evidente que Adrian Peterson o AP como suele llamársele, se sabía ser el centro de atención de ese circo de cámaras y gente de traje y risas nerviosas que se postraban sobre el lugar, y nosotros viéndolo a través del computador…
Vayamos al pasado y recordemos como es que llego ahí. Le vimos un Lunes por la noche, en el televisor, sirviendo comida a los jóvenes invitados a su casa, dando la mejor de las impresiones a tan solo unos días del comienzo de la temporada de la NFL, después, en esa misma semana, las primeras noticias de sus rechazables actos se hicieron presentes en las noticias del Viernes. Cuando tal vez, ya todo boleto estaba vendido, cuando tal vez ya los esfuerzos de venderlos por temporada estaban concretados. Minnesota entonces despertaba ante la posible no participación de su gran estrella. Muchos cerraban los ojos y pensaban que quizá era mentira o que quizá no era tan grave, que su MVP podría regresar a tiempo para jugar el Domingo.
Después vinieron las fotos y la evidencia de que sus hechos dejaron huella. Adrian Peterson fue acusado de haber castigado a su hijo de 4 años con una vara de madera o una rama de un árbol, algo que tal vez no suena tan alarmante pero al ver las fotos supimos que tal vez el no se detuvo al ver los primeros signos o marcas hechas por esas varas o ramas, o del dolor que este castigo pudo haber causado. El lugar de los hechos, su casa de Houston, al principio de año.
Peterson esta hoy en corte por esa razón, y aunque su justificación sea que el fue educado o controlado de la misma forma, el esta en problemas con la ley. El jugador es acusado de abuso infantil y puede ser acreedor a una pena de dos años en prisión y $10,000 de multa, en caso de ser encontrado culpable de lastimar al menor.
La afición y los Vikingos lo extrañan, era su carta fuerte, la estrella de la NFL y la cara del equipo, y es poco probable que regrese, Peterson ha sido relegado del equipo con goce de sueldo y de acuerdo a los Vikingos, esto continuará así hasta que sus problemas legales sean arreglados. La temporada regular culmina casi exactamente al final del año y solo y si Peterson arregla sus problemas, y si la afición lo perdona y si es correcto el ponerlo a jugar se dará el regreso del corredor. Pero no lo creemos, tal vez sea mejor olvidarse que Minnesota una vez tuvo un gran corredor, de una sonrisa clara y amigable que se obscureció en un momento importante de su carrera y de las ambiciones de su equipo, en la víspera de un grande y costoso estadio, en la víspera de un soñado Super Tazón.
Una nube esta opacando a la estrella, al jugador profesional que hoy es acompañado por su esposa y su madre a una reunión, a un juego que no desea o dice merecer no estar. Peterson jugará en corte el partido mas importante de su gran carrera y de comienzo lo jugará sin afición, sin uniforme, sin apoyo.