MINNEAPOLIS, MN
Ha comenzado ya el año 2018, y se antoja como un año de reconfiguraciones políticas en América Latina. Y es que son al menos seis los países en los que este año se celebrarán comicios presidenciales.
Cosa Rica, Paraguay, Colombia, México, Brasil y Venezuela han establecido ya fechas precisas para la realización de los procesos electorales que llevarán a la renovación de los cargos ejecutivos en cada uno de ellos. Y acaso habría que sumar a Cuba, en donde se sabe que el actual presidente, Raúl Castro, dejará el cargo en al mes de abril, para que llegue su reemplazo.
El primer proceso tendrá lugar en Costa Rica, en el mes de febrero, cuando se realizará la primera vuelta de las elecciones presidenciales y legislativas. Eso ocurrirá el domingo 4, y se trata de las decimo séptimas elecciones que se habrán de realizar en el país centroamericano. Eso ocurrió a partir de la fundación de la llamada Segunda República, en 1949. Hoy, serán 13 los candidatos que disputarán el privilegio a dirigir los destinos del país, resaltando los nombres de Antonio Álvarez Desanti, candidato del Partido Liberación Nacional, Juan Diego Castro, del Partido Integración Nacional Y Rodolfo Piza, del Partido Unidad Social Cristiana. Carlos Alvarado, del oficialista Partido Acción Ciudadana, se coloca en cuarto sitio en las encuestas, por lo que se ve muy probable el regreso de la centro-derecha al poder. Acaso seamos testigos de una segunda vuelta para saber con certeza quien será ungido como presidente.
El 22 Abril, Paraguay elegirá presidente, por séptima ocasión desde el retorno a la democracia en el país, en 1989. En este proceso, se elegirán también gobernadores, senadores y diputados, tanto para el parlamento local, como para representar al país en el Mercosur. En este caso, la confrontación más clara se dará entre el partido derechista, Colorado, que ha gobernado al país por buena parte de los últimos 70 años, y la coalición centro-izquierdista integrada por el Partido Liberal y el Movimiento Guasú. Mario Abdo Benítez representará al primer grupo, mientras que a la cabeza de la alianza GANAR, se encuentra Efraín Alegre, quien está acompañado en la fórmula por Leonardo Rubín, periodista que aparece como candidato a la vicepresidencia.
Colombia tendrá su proceso el 27 de mayo, con altas expectativas en torno a una segunda vuelta electoral que tendría lugar en el mes de junio, a fin de determinar quién ocupara la residencia Casa de Nariño como presidente. Estas elecciones cobran singular importancia dada la candidatura de Rodrigo Londoño, ex comandante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Pero Londoño se presenta como candidato de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (también FARC), para enfrentar a candidatos que estarían en contra o a favor de la firma de la paz
El 1 de julio, en México se llevará a cabo un proceso también que mantiene la atención de propios y extraños. Ello debido a que hasta el momento, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien compite en elecciones por tercera ocasión, se mantiene al frente en las preferencias en casi todas las encuestas realizadas en México. El candidato de la alianza entre Morena, Partido de los Trabajadores y PES, estuvo cerca en los dos procesos anteriores, por lo que diversos analistas le ven ventaja no sólo porcentual, sino de percepciones, ante Ricardo Anaya, candidato del Frente por México (Partido Acción Nacional, Partido de la Revolución Democrática, y Movimiento Ciudadano). En tercer sitio se ubica José Antonio Meade, candidato del oficialista Partido Revolucionario Institucional. En caso de que López Obrador ganase los comicios, faltaría que el mismo régimen permita que ocurra la transición, dada la nueva Ley de Seguridad Pública, que ha presentado el presidente Peña, que anticipa la intervención del ejército ante posibles protestas sociales.
Brasil vivirá su propia historia el 7 de octubre, con una muy probable segunda vuelta a verificarse el 28 del mismo mes, y donde llama poderosamente la atención el retorno de Luiz Inácio Lula da Silva, como representante del Partido de los Trabajadores, que hoy se encuentra en medio de una nube de acusaciones de corrupción. La presencia de Lula es sin duda una condición para hacer de este proceso electoral algo único, y es muy probable que el PT no vea resultados positivos en el proceso sin él.
El mes de diciembre, para cerrar el año del 2018, se ha planteado como el momento en el que la oposición venezolana podrá ver su sueño convertirse en realidad, buscando crear un frente que sea de contrapeso al actual presidente, Nicolás Maduro. Esto si Maduro decide mantener la fecha inicialmente propuesta, y no ordena adelantar los comicios, como medida para aprovechar las divisiones que hoy vive la oposición. Esto es, no existe una figura potencial entre los grupos contrarios a Maduro, que pueda ser garante de resultados positivos para ellos.
Un año difícil, de posibles cambios y reconfiguraciones de poder en la región latinoamericana, sobre todo ante la presidencia actual en los Estados Unidos.
