MINNEAPOLIS, MN
Si se desea visitar los Estados Unidos bajo una categoría cualquiera de no inmigrante, podría ocurrir que el Departamento de Estado se interponga entre el proceso de aplicación por la visa, y el bajar del avión con sello de Bienvenido a los Estados Unidos estampado en el pasaporte.
Una propuesta presentada por la administración de Donald Trump, publicada el pasado viernes 30 de marzo, en el Federal Register, otorgaría el derecho al Departamento de Estado a expandir el requisito de que el contenido de las redes sociales de los solicitantes sea revisado sin solicitar permiso de quien haya iniciado un trámite para obtener la visa.
La medida propuesta podría entrar en vigor luego de un período de 60 días en el que se abriría un proceso de consulta pública, por el que tendría que pasar en caso de que haya sido aprobada por la Oficina de Manejo del Presupuesto (OMB por sus siglas en inglés). En forma alterna, el Departamento de Estado podría modificar la propuesta, e iniciar un nuevo proceso de consulta pública.
En caso de que esta propuesta llegue a implementarse, el número estimado de 14 millones de solicitantes de visa que se suman anualmente, podrían recibir la solicitud de escribir todos los nombres de usuario e identificadores que usen en los medios sociales. En caso que los solicitantes se encuentren activos en el pasado en sitios que no se encuentren en la lista del Departamento de Estado, les será solicitado igualmente que entreguen nombre de usuario y abrir acceso al sistema para que las autoridades puedan analizar el contenido de sus comunicaciones.
Dentro de la propuesta se considera también la posibilidad de que el Departamento de Estado, y su personal, pueda requerir a los solicitantes que provean sus números telefónicos anteriores, sus direcciones de correo electrónico que ya no usen, números de pasaportes previamente expedidos, y récords de viajes internacionales que se hubiesen efectuado.
La categoría de visas para no inmigrantes es amplia, e incluye a todo tipo de estudiantes internacionales, turistas, y visitantes por motivos de negocios. De tal forma que el Departamento de Estado estima que el cambio propuesto llegaría a afectar a cerca de 14 millones de solicitantes al año. Son tan sólo 38 los países de donde provienen visitantes que son exentos, generalmente, de visa para entrar a los Estados Unidos. Por tanto, ellos no se enfrentarían al escrutinio propuesto.
Con todo lo anterior, se estaría promoviendo la expansión de una medida ya sugerida por la presidencia de Barack Obama, que ha dejado como opcional el proveer de nombres de usuarios den redes sociales. Medida que sus críticos han atacado por ser profundamente invasiva e inefectiva.
Asimismo, esta medida de hoy se ha buscado implementar en el caso de solicitantes de visa, provenientes de países musulmanes.