MINNEAPOLIS, MN
Ha llegado, una vez más, el tiempo en el que el cine toma la ciudad de Minneapolis, llegando de todo el mundo. Cintas de muy diversos orígenes, representando lo mejor de la producción fílmica mundial, como si se tratase de traer, al celuloide, un grupo selecto de inmigrantes temporales que habrán de mostrar lo mejor de sí mismos.
Se trata de la 37 edición del Festival Fílmico Internacional, organizado por la Sociedad Fílmica de Minneapolis y St. Paul (MSPIFF, por sus siglas en inglés). La fiesta comienza el 12 de abril, y nos lleva por una frenética ruta de filmes diversos, hasta el 28.
Reconocido como el festival cinematográfico más grande del Medio Oeste en los Estados Unidos, el MSPIFF convoca la presencia de alrededor de 40,000 personas que año con año se dan cita, se reconocen, se reencuentran y retoman esa conversación que quedó pendiente un año atrás, al cruzar por los pasillos para transitar de una a otra sala.
El evento se desarrolla en las salas del Saint Anthony Main Theatre, justo a la vera del Río Mississippi.
En la presente edición del festival, 75 países estarán representados con proyecciones en la pantalla, con énfasis en trabajos desarrollados por y sobre mujeres, pero que en suma ofrece la posibilidad de conjugar y convocar a todas las voces posibles para concebir, idear y construir un mundo mejor. Como lo ha dicho la directora ejecutiva de la Sociedad Fílmica de Minneapolis y St. Paul (MSPFS), Susan Smoluchowski, el cine es un medio poderoso, y muy democrático, en el que confluyen esas voces que intercambian ideas respecto a los asuntos locales e internacionales.
El festival arranca con una cinta que es un aclamado documental sobre la Juez Suprema de Justicia, Ruth Bader Ginsberg, quien se ha convertido en un héroe para el grupo llamado de Milenios, en donde se da cuenta de los obstáculos y problemas que ha tenido que confrontar una feminista que hoy cuenta con prestigio y reconocimiento internacionales. La cinta RBG habría de ser infaltable en el festival, y abre para proponer el tono que habrá de llevar el festival.
Los temas que abarca el programa completo del festival incluyen Encantos y Puentes, que da cuenta del cine como medio para construir puntos comunes de acción. Fronteras asiáticas, presenta una colección de cintas que dan cuenta de la vida de cerca del 60 por ciento de la población mundial, con brillantez e imaginación, nos promete el programa.
Películas infantiles y sobre niños ocupa un espacio igualmente importante, junto con una nueva propuesta para explorar el mundo oscuro, el de los zombis, policías, criminales y todo también como parte de lo inexplicable.
Una serie de documentales estará presente, con temas diversos y variados. Cine experimental, cine africano y maestros del cine, conforman y comparten espacios con producciones locales, minnesotanas y visiones de lo que se ha identificado como la Nueva América.
Mucho que ver, mucho para tan poco tiempo, por lo que habrá de ser cuidadoso con los tiempos, y perderse lo menos posible, disfrutando del 37 festival internacional de cine de la Sociedad Fílmica de Minneapolis y St. Paul.
