MINNEAPOLIS, MN
En Minnesota, estamos viviendo un período singular. No se trata de una singularidad que nos guste, y antes bien, muchos enfrentan serios problemas al intentar adaptarse a las bajas temperaturas que nos invaden. Por lo regular, el mes de noviembre registra temperaturas que en promedio se sitúan en los 40 grado Fahrenheit (alrededor de 4.5 Centígrados). En contraste, hemos visto y sufrido el registro de 15 a 20 grados F como máximas temperaturas (entre -6 y -10 C), y con mínimas que, con el factor de congelamiento, han llegado a -11 F (-24 C).
Si bien el residente común en el área metropolitana, o en el estado, expresa molestia por lo inclemente de las temperaturas que nos encontramos al salir de casa, el problema es crítico para aquellos quienes carecen de un techo, los sin-hogar. De acuerdo con datos del Concejo de Interagencia sobre los Sin–Hogar de los Estados Unidos, se estima que en Minnesota el número de personas sin techo asciende a 8,214. Incipiente número, si se compara con los 136,826 que se han identificado en California. Pero la comparación debe incluir el factor de congelamiento. En California es posible vivir en la calle, en Minnesota, se puede uno morir en la calle durante el invierno.
Otras estimaciones proponen que la cifra actual de sin-hogar asciende hasta a 14,000 personas, con 46% de ellos siendo niños y jóvenes menores de 21 años de edad. Se cree que el crecimiento en el número de estas personas se debe a la vitalidad económica, que sin embargo no logran beneficiarse de ella, al no encontrar una posición laboral o perder por alguna razón lo que habrían tenido.
Enfocados en su rescate, diferentes organizaciones buscan conseguir fondos, al menos para que quienes carezcan de un hogar, puedan encontrar un sitio para pasar la noche, sin quedar expuestos al gélido clima. Por ejemplo, el Centro Diario Dorothy, en Saint Paul, sirviendo a esta población por los últimos 32 años, planea en expandir su espacio, a fin de albergar a un mayor número de personas. El Lugar de María (Mary’s Place), cercano al estadio de béisbol Target, inició la construcción de una expansión a fin de dar servicio a un mayor número de niños y familias sin hogar.
En las Twin Cities, existen 8 diferentes centros de atención a personas sin-hogar, que sin embargo, al igual que los listados arriba, no logran darse abasto para atender una demanda creciente. Muchos incluso declaran dormir debajo de los puentes de las ciudades, o bien es posible ver a quienes portan un letrero señalando vivir en tiendas de campaña, y que el frío inclemente les causa problemas, con el fin de solicitar ayuda a los conductores que pasan por las calles.
El temor de que la hipotermia cause estragos, entre ellos la muerte, es latente entre quienes buscan auxiliar a quienes lo necesitan. Pero la carencia de un censo preciso, y de la escurridiza presencia de estas personas, conlleva la incertidumbre sobre el destino de quienes no han podido ser localizados. En tantos casos, según datos de Transitional Living Communities, un alto porcentaje de personas sin hogar padecen de adicción a alguna o algunas drogas. El problema se torna más y más visible, y se requiere de una acción coordinada de agencias e instituciones para atenderlo. Nuestra participación como ciudadanos es muy importante.