MINNEAPOLIS, MN.
El camino de los Timberwolves a los playoffs, por último, es simple, pero nada fácil. A pesar de su victoria por 113-94 sobre Memphis el lunes por la noche en Target Center, los Wolves serán anfitriones de Denver el miércoles por la noche y el ganador irá a los playoffs de la Conferencia Oeste de la NBA, y los perdedores irán a casa.
“Una victoria puede controlar nuestro propio destino”, dijo Jimmy Butler. “Tenemos un juego el miércoles de todos modos. Pase lo que pase, vamos a ganar allí “.
Esos comentarios se produjeron después de que los Wolves sobrevivieron a un horrible comienzo del partido del miércoles, quedando atrás de un equipo que vestía solo a nueve jugadores, para volver fuertes, superando a los Grizzlies 57-41 en la segunda mitad.
En ese momento, los Wolves tuvieron la oportunidad de asegurarse un lugar en los playoffs, San Antonio vencía a Sacramento y Portland vencía a Denver. Los Spurs mantuvieron su ventaja, pero la victoria de Denver, seguida de la victoria de Nueva Orleans sobre los Clippers de Los Angeles la noche del lunes a última hora, hizo prácticamente obligatorio una victoria el miércoles para los Timberwolves.
“Hemos pasado por esto antes”, dijo Taj Gibson, refiriéndose al equipo Chicago Bulls 2009-10 en el que él y Derrick Rose estaban, que tenía que ganar su juego final para clasificar a los playoffs. Gibson vio los últimos 32 minutos del juego del lunes desde el vestuario, y se fue con un dolor en el cuello que podría hacer cuestionable su estado para el miércoles. “Todo se reduce a conocer a tu oponente y desearlo aún más”. Comprender el último juego con Denver no nos sentó bien “.
Butler estaba en esta situación en Chicago el año pasado, también, necesitando una victoria para calificar.
Era un extraño vestuario el lunes. Hubo felicidad por la victoria, pero no hay certeza sobre su destino en los playoffs; Se escucharon gritos y gritos provenientes del vestuario de los entrenadores cuando el juego Denver-Portland se fue a tiempo extra.
En definitiva, es un juego de miércoles y una oportunidad para los Wolves de vengarse de la derrota 100-96 del último jueves en Denver, el último juego que jugaron los Wolves sin el lesionado Butler. Una victoria el miércoles significaría la primera aparición en los playoffs de los Wolves desde 2004.
