Quito, 7 sep (EFE).
La banda mexicana de rock alternativo Zoé presenta hoy en Quito un concierto en el que expondrá su visión de una Latinoamérica profunda, que se refleja en su último álbum Aztlán.
Los cinco integrantes del grupo mexicano se presentan esta noche en el Ágora de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, de Quito, y mañana, sábado, en el Club Nacional de la ciudad portuaria de Guayaquil.
“La injusticia, la desigualdad, la corrupción y la migración se conjugan en América Latina y (así) se lo expresa en este cedé (disco compacto). Con metáforas hablamos puntualmente de esos problemas”, aseguró el vocalista de Zoé, León Larregui, en una conversación con la prensa previo al concierto de hoy en la capital ecuatoriana.
Y es que para Larregui, el “vecino del norte”, Estados Unidos, “y su muro”, la valla que el presidente Donald Trump quiere poner en la frontera, también ha provocado el reencuentro de “los mexicanos con su cultura” y les ha recordado “sus raíces”. Opuestos a la iniciativa de Trump, el vocalista de Zoé dijo que es justamente este tipo de cosas las que se reflejan en Aztlán, así como otros problemas que la región ha afrontado por décadas.
Tampoco dejó dudas de que la banda ha logrado afincar su presencia gracias a las influencias musicales de legendarios grupos británicos como The Beatles, The Cure u Oasis.
Por eso, en sus interpretaciones utilizan un teclado análogo, con el que logran, según Larregui, una sinfonía “vintage (antigua) y oscura”, pero al mismo tiempo “alegre”.
Larregui, con su usual sencillez, explicó que la banda no se dejará llevar por la “onda urbana actual”, pese a que han recibido propuestas de colaboración con artistas de renombre en el mundo del reguetón. Ellos se mantendrán firmes con su propuesta.
Aztlán, según apuntó, es el álbum que presenta la banda después de cinco años de estar separados por atender proyectos personales y cuyo nombre surge de una leyenda Azteca sobre el origen de la mexicanidad, por lo que el compacto busca invitar a sus compatriotas a proteger y valorar su cultura.
Zoé, en su presentación, aclaró que este álbum es una representación futurística de México. Para ellos, la victoria del partido Alianza Morena (coalición política gobernante), es el inicio de una nueva historia.
La banda, dijo Larregui, espera una transformación profunda, pero dijo estar consciente de que esto no sólo depende del presidente Andrés Manuel López Obrador, sino de todos los mexicanos.
Mediante la música, ellos declaran aportar lo suyo para mejorar la situación de su país.
Por otro lado, Ángel Mosqueda, bajista del grupo, explicó que este último disco, grabado en 2017, es una coproducción realizada por el australiano Craig Silvey, quien hizo la mezcla del compacto.
Para Mosqueda, Aztlán mantiene a un “Zoé fresco y radiable”, pero admitió que entrar en América Latina es un asunto difícil así como mantenerse en una industria musical que no está abierta al rock alternativo.
Los recitales que ofrecerán en Quito y Guayaquil forman parte de su gira por Latinoamérica denominada “Zoé Tour 2018” que, además de Ecuador, tiene como escalas a Perú, Colombia, Costa Rica, Chile y Argentina.
La banda mexicana, que tiene entre sus melodías más icónicas a “Nada”, “Labios rotos” y “Azul”, está formada por Larregui (vocalista), Sergio Acosta (guitarra), Jesús Báez (teclado), Ángel Mosqueda (bajo) y Rodrigo Guardiola (batería).
Zoé fue fundada en 1995 en la ciudad mexicana de Cuernavaca, al sur de la capital, y se oficializó en 1997.
