SAINT PAUL, MN
Los resultados de un estudio de nutrición reciente, muestran que el consumir una dieta moderada en grasas que incluya aguacate fresco, podría beneficiar los niveles de colesterol más que una dieta moderada o baja en grasas que no incluya aguacate.
El estudio publicado en el diario “Journal of the American Heart Association“ identificó que la relación de colesterol malo a bueno mejoraron significativamente tanto en hombres como mujeres saludables con sobrepeso y obesos, cuando siguieron una dieta moderada en grasas incluyendo un aguacate fresco diario, en comparación a cuando consumieron una dieta similar moderada o baja en grasas, pero sin aguacate.
Esta evidencia científica se suma a una gran cantidad de investigaciones que vinculan los niveles de colesterol a la dieta. Mejorar los niveles de colesterol podría ser importante para los hispanos en Estados Unidos quienes cuentan las enfermedades cardiovasculares como principal causa de muerte en la comunidad.[1]
Un nivel elevado de colesterol en la sangre puede incrementar los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular. Una dieta saludable para el corazón puede jugar un papel importante en el mantenimiento de los niveles de colesterol dentro de un rango normal. Por ejemplo, la Guía de Alimentación del 2010 para Estadounidenses recomienda comer más frutas y vegetales por muchas razones, entre ellas la evidencia que sugiere que el consumo de al menos 2½ tazas de frutas y vegetales al día está relacionado con la reducción del riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.
En el estudio de la Universidad de Pensilvania, los investigadores descubrieron que la dieta que incluía aguacate mejoró significativamente la relación de colesterol total con el HDL o colesterol “bueno”, así como la relación de colesterol LDL o “malo” y el colesterol HDL. Las dietas moderadas y bajas en grasas sin aguacate no mejoraron estas proporciones significativamente.
“Los resultados de este estudio sugieren que la grasa monoinsaturada, fibra, fitoesteroles y demás bioactivos en los aguacates podrían tener un mayor impacto positivo en los factores de riesgo asociados con las enfermedades cardiovasculares que las dietas bajas en grasa con la misma cantidad de calorías” afirma Penny Kris-Etherton, Ph.D., RD, líder del estudio, quien es experta en nutrición cardiovascular y una profesora distinguida en la Universidad del Estado de Pensilvania.
Una posible explicación al por qué la dieta moderada en grasas con aguacate tuvo un efecto más beneficioso que la dieta moderada en grasas sin aguacate, es porque el aguacate aporta un 35% más de fibra, la cual se relaciona con niveles de colesterol bajos.
A pesar de haber obtenido las conclusiones de un único estudio que no puede extrapolarse al resto de la población, el mismo provee información acerca de la relación entre los aguacates y los indicadores biológicos de las enfermedades cardiovasculares, como el colesterol LDL. Queda por verse si los resultados se pueden replicar en otros grupos aparte de adultos obesos saludables, o con sólo una porción de aguacate, en lugar de un aguacate entero al día.
Los aguacates frescos contienen grasas insaturadas “naturalmente buenas” y no contienen colesterol. De hecho, más del 75% de la grasa en el aguacate es insaturada, lo que lo hace el sustituto ideal de comidas altas en grasa saturada. El aguacate es una fruta versátil que se puede comer entre comidas, en el desayuno o la cena.
“Los aguacates son parte intrínseca de la cultura Hispana y son fáciles de incorporar en gran variedad de planes alimenticios saludables. La combinación entre autenticidad y su potencial para impactar la salud del corazón es muy prometedora y vale la pena continuar investigando”, comentó Emiliano Escobedo, Director Ejecutivo del Consejo del Aguacate Hass (HAB por sus siglas en Inglés), el cual financió el estudio. “A partir de esta base, HAB continuará invirtiendo en investigación nutricional que explore los beneficios de incluir aguacates frescos en el menú del día a día.”
El estudio de la Universidad del Estado de Pensilvania es uno de varios estudios financiados por el Consejo del Aguacate Hass como parte del programa de investigación establecido en el 2010. Actualmente se están llevando acabo estudios clínicos con los mejores investigadores y universidades a lo largo del país, que estudian la relación entre el consumo de aguacate y los factores de riesgo de la diabetes, el manejo del peso y la calidad de vida.
