El presidente, Donald Trump, arremetió hoy contra la Reserva Federal (Fed) y llamó “despistado” a su presidente, Jerome Powell, después de que se encendieran las alarmas por una posible recesión económica futura.
“Nuestro problema es con la Fed. Subieron (los tipos de interés) demasiado y demasiado rápido. Ahora demasiado lento para bajarlos; otros países se lo están agradeciendo al despistado Jay Powell y la Fed”, criticó Trump en su cuenta de Twitter.
El mandatario catalogó de “locura” la inversión de la curva del rendimiento de la deuda pública a corto y largo plazo que se registró hoy en el mercado de bonos y que llevó a los analistas a pronosticar una recesión en los próximos 36 meses.
Los inversores se fijaron hoy en el mercado de la deuda estatal, en el que la rentabilidad de los bonos del Tesoro a 10 años se situó en torno al 1,596 % y la de los títulos a 2 años en el 1,593 %, tras invertir sus posiciones brevemente.
Esta situación generó inquietud entre los inversores, ya que el fenómeno ha precedido a varias recesiones y muchos lo consideran una señal de que la economía va en picado.
“Deberíamos estar cosechando grandes recompensas y ganancias, pero la Reserva Federal nos está frenando”, opinó al respecto Trump, que a la vez defendió su estrategia comercial con China y consideró que su guerra comercial con la potencia asiática “no es un problema”.
Trump salió al paso de las críticas después de que la etiqueta #TrumpRecession se convirtiera hoy en una de las tendencias de Twitter.
Pese a que tradicionalmente los presidentes del país no han opinado sobre la política monetaria, que es potestad de la Fed, es ya habitual que Trump critique los movimientos del banco central y de Powell, quién él mismo escogió para el cargo.
Sin ir más lejos, Trump presionó la semana pasada a la Fed para que vuelva a bajar los tipos de interés de referencia en el país, apenas una semana después de que el banco los rebajara un cuarto de punto, hasta el rango de entre 2 y el 2,25 %.
Ese fue el primer recorte del precio del dinero en el país en más de una década, ya que el anterior se produjo justo después de la aguda crisis financiera de finales de 2008.
La próxima reunión de política monetaria será el 17 y 18 de septiembre y en ella se darán a conocer las nuevas previsiones de crecimiento e inflación.
