MONTEVIDEO, MN
La pequeña Katelyn Pauling, de escasos 8 años de edad, ha fallecido. Katelyn, quien padecía de epilepsia, junto con un desorden del sistema nervioso conocido como la enfermedad de Batten. La niña en su momento logro convertirse en una celebridad, ella había sido asidua visitante de las oficinas de legisladores y del gobernador mismo, cuando se debatía en Minnesota el legalizar el uso de la marihuana en forma de fármaco para aliviar los padecimientos que la niña sufría.
La familia Pauling es residente de la ciudad de Montevideo, al oeste del estado de Minnesota, y sus miembros lucharon con convicción en busca de un posible remedio a la enfermedad que aquejaba a la Katelyn. Y es que, al ser una enfermedad de carácter hereditario, quienes contraen Batten no cuentan con ninguna alternativa para aliviar el dolor y las molestias que ello causa. La enfermedad es fatal, de carácter neurológico, y uno de sus síntomas es la epilepsia, que se manifiesta con fuertes convulsiones.
Los padres de Katelyn, Kristy y Jeremy Pauling, trasladaron a su hija a la ciudad de Saint Paul, al tiempo que ellos testificaban durante la pasada sesión de la legislatura, a fin de presentar argumentos en apoyo de la legalización médica de la cannabis en el estado. Luego de ello, Jeremy Pauling participó entre quienes sometieron una propuesta para desarrollar centros de producción de la droga en forma legal. Por ello mismo, Jeremy forma parte hoy de un grupo que trabaja con el gobernador Dayton, a fin de promover investigación académica sobre los beneficios médicos del cannabis.
Desafortunadamente, la familia Pauling no logró contar con autorización para emplear la marihuana médica con Katelyn, aun cuando pensaban que, de haberlo logrado, podrían haber aliviado las convulsiones que padecía la niña. Previamente, y al ver el tiempo que tomaba a la legislatura la implementación de las regulaciones en el uso de cannabis clínica, Jeremy Pauling habría anunciado que estaban pensando en mudarse a otro estado, en el que dicha condición existiese, pero al momento de consultarlo entre los miembros de la familia, se decidió no hacerlo. Ninguno de ellos deseaba apartar a la niña del sistema de apoyo familiar con que contaba, a quienes se sumaban amigos de la familia.
“[Katelyn] hizo mucho mientras estuvo con nosotros,” dijo Jeremy Pauling en una entrevista al diario Star Tribune. “Traerla [al capitolio] y permitir que la gente escuchara su historia cambió las mentes de muchas personas y eso va a ayudar a muchas otras. Ella estaba aquí por alguna razón. Creo que completó con los objetivos de esa razón, y llegó entonces a decir: ‘Papá, he terminado de luchar. No deseo hacer daño a nadie más’”
Será a partir del próximo mes de julio que el uso del cannabis para el tratamiento de convulsiones será legal en el estado. En diversos medios y publicaciones médicas, se ha subrayado que la marihuana puede reducir el número ce convulsiones entre quienes las padecen. Se estima que el producto puede ser tan efectivo como para logra que los cientos de eventos que registra una persona en condición crítica en un día, puedan llegar a ser casi cero, en algunos casos.
Ketelyn falleció en casa el pasado viernes, y su obituario fue escrito por sus hermanas Kaylee y Kassey, quienes se refirieron a ella como “la mejor hermana bebé.”
