MINNEAPOLIS, MN
Activistas del trabajo e inmigración se han reunido el día de ayer para apoyar a líder de los trabajadores, Luciano Mejia Morales quien se enfrenta a la deportación.
Mejia Morales, quien recientemente fue parte de una campaña para sindicalizar a trabajadores de limpieza, fue detenido por agentes de inmigración después de que fue liberado de la cárcel del Condado de Hennepin después de pagar una fianza de 3 mil dólares, luego de haber sido detenido en Richfield por una infracción de tránsito.
Morales Mejia es un conserje y activista con los trabajadores del Centro de Trabajadores Unidos en Lucha (CTUL), quien se convirtió activo en una campaña para comenzar un sindicato en las Ciudades Gemelas, convirtiéndose así en la primera área metropolitana en donde se sindicalizan. También participó en la lucha por un aumento a 15 dólares al salario mínimo.
En 2009 Morales fue deportado antes de que pudiera solucionar un caso pendiente de DWI y un juez emitió una orden de detención. Aunque no esta claro si esto contribuyó a su arresto el pasado mes de junio tras pasarse una señal de tránsito y manejar sin licencia en Richfield. Fue llevado a la cárcel del Condado de Hennepin.
Aun cuando sus hermanos lograron reunir el dinero para la fianza, fue detenido por agentes de inmigración poco después de haber sido libertado. Ahora esta encarcelado en la cárcel del Condado de Carver.
El sheriff del condado de Hennepin, Richard Stanek dijo que aunque sus agentes no honran las peticiones de la Agencia de Inmigración (ICE) para retener a los presos, la oficina del sheriff tiene que notificar al ICE cuanto el sujeto en cuestión es liberado.
En la página de Facebook: ¡No a la deportación de Luciano!, creada por varias asociaciones que lo apoyan piden que no dejen que un trabajador y líder de la comunidad sea deportado por un infracción menor y que hablen a la oficina de ICE al 612-843-8600 (6) para que soliciten su liberación.
“Luciano está a punto de ser deportado a Guatemala, de donde se vio obligado a huir en dos ocasiones debido a los altos índices de violencia y pobreza que atraviesa el país centroamericano”.
Sus partidarios argumentan que Guatemala no es un lugar seguro para una persona que ha sido deportada de Estados Unidos, particularmente uno que ha estado activo en organizaciones sindicales.
La deportaciones a los países que luchan en contra del malestar político y social, están en el centro de atención de la administración Trump, quien ha prometido acciones más duras contra la inmigración ilegal.
En los últimos años, la pobreza y la violencia de pandillas en Centroamérica ha impulsado la entrada a los Estados Unidos por la frontera con México.