MINNEAPOLIS, MN.-
Casi la mitad de los trabajadores de la salud en Estados Unidos da cuenta de discriminación en el trato que se da a los pacientes de minorías raciales y étnicas, según un estudio publicado este jueves por The Commonwealth Fund.
“La discriminación es inaceptable y sabemos que debemos hacer algo acerca de ella”, dijo en una teleconferencia Joseph Betancourt, presidente de la fundación privada, creada en 1918 y que trabaja en varias áreas vinculadas con la salud.
“Sabemos que los trabajadores de la salud experimentan esa discriminación y que ella conduce a resultados deficientes para los pacientes”, añadió Betancourt. “El progreso es posible y necesario y cuando atendamos esa discriminación mejorará el cuidado de la salud para todos”.
Henry Fernández, director general del grupo de investigación African American Research Collaborative, indicó que los trabajadores de la salud afroamericanos y latinos dan cuenta, más que sus colegas blancos, de situaciones de discriminación en perjuicio de los pacientes y que esa percepción también varía con las edades.
“Los trabajadores de la salud más jóvenes tienden a percibir el racimo más que sus mayores”, explicó Fernández,
El estudio se sustenta en entrevistas por internet y teléfono, entre marzo y abril de 2023, con 3.000 trabajadores de la salud en una variedad de contextos de la atención de pacientes y la conclusión principal es que “la discriminación por raza, grupo étnico o lenguaje es un problema serio”.
Este problema “afecta la provisión de cuidado y la moral de la fuerza laboral”, indicó Fernández.
El 33 % de los encuestados opinó que el racismo contra los pacientes es un problema grave y un 19 % indicó que es una crisis, según el informe. Un 25 % de los entrevistados cree que el racismo es un problema menor y un 18 % opinó que no es un problema.
El 47 % de todos los encuestados señaló que ha sido testigo de discriminación contra los pacientes, y ese testimonio lo dio el 32 % de los trabajadores afroamericanos y el 58 % de los latinos, según el informe.
En lo que hace a los pacientes, explicó Fernández, el 70 % de los testimonios de discriminación se refirió principalmente a pacientes afroamericanos, un 61 % a pacientes latinos y un 43 % a pacientes blancos.
La investigación encontró que los pacientes que hablan, principalmente, español, chino u otros idiomas aparte del inglés no siempre reciben del personal de salud un tratamiento de calidad igual en comparación con el que reciben los pacientes que hablan inglés.