MINNEAPOLIS, MN.
Christensen Farms, una productora de carne de cerdo familiar con sede en Sleepy Eye, Minn., fue una de las docenas de empresas allanadas por agentes de inmigración federales el miércoles, por presuntamente contratar y maltratar a trabajadores sospechosos de estar sin documentos en el país.
La operación fue dirigida por las Investigaciones de Seguridad Nacional de EEUU, el brazo de investigación de Inmigración y Control de Aduanas, y las firmas agrícolas de Minnesota y Nebraska acusadas de explotar a los trabajadores con fines de lucro.
Christensen Farms es uno de los productores de carne de cerdo más grandes del país, con casi 1,000 empleados y firmas en varios estados del medio oeste. Las órdenes de búsqueda se entregaron en la sede central de Sleepy Eye de la empresa, así como en las ubicaciones de Appleton, Minnesota y Atkinson, Nebraska.
La portavoz de la compañía, Amber Portner, le dijo a Associated Press que la compañía estaba cooperando con ICE y que no sabía de arrestos realizados en las instalaciones de la empresa el miércoles.
En total, las autoridades emitieron órdenes de arresto contra 133 trabajadores sospechosos de estar en el país sin papeles en Minnesota, Nebraska y Nevada, según ICE, además de 17 personas relacionadas con la supuesta conspiración.
“Estos negocios específicos estaban contratando a trabajadores sin documentos a fin de cubrir sus bolsillos ilegalmente engañando a los trabajadores, engañando a los contribuyentes y engañando a sus competidores comerciales”, dijo Tracy Cormier, la agente especial a cargo de la operación, en el comunicado.
ICE dijo que la operación formaba parte de una investigación de 15 meses a compañías acusadas de emplear inmigrantes que llegan ilegalmente al país.
“Se alega que estos inmigrantes sin documentos debían cobrar sus cheques de pago en un negocio de remesas ilegal por una tarifa, deducir el dinero de impuestos de su paga a pesar de que este dinero nunca se pagó al gobierno y se les obligó a permanecer callados sobre esta actividad criminal”, se señalaba en el comunicado de prensa de ICE.
Los arrestados fueron puestos bajo custodia hasta que sus casos sean procesados. Algunos recibirán avisos para comparecer ante un juez de inmigración y serán liberados, mientras que otros permanecerán en las instalaciones de ICE hasta que se inicien los procedimientos judiciales.
Brad Sigal, un activista del Comité de Acción por los Derechos de Inmigrantes de Minnesota, calificó el ataque como “cruel e innecesario”.
“No se puede simplemente mirar la presidencia de Trump y ver esto como un caso aislado, que repentinamente se preocupa por los derechos de los trabajadores”, dijo. “Este es solo un ataque más a los trabajadores, cuyas vidas se verán dramáticamente empeoradas por esto”.