EDEN PRAIRIE, MN
Mientras que los demócratas y republicanos se pasan la pelota tratando de evitar un cierre de gobierno, el reloj sigue avanzando y el viernes se acerca, mientras el país se prepara para enfrentar una posible paralización del gobierno federal.
Aunque esta no es la primera que el gobierno amenaza con un cierre, la posibilidad resulta extraordinaria cuando el mismo partido controla el Congreso y la Casa Blanca. En septiembre y diciembre logró evitarse el cierre gracias a las medidas de financiamiento parciales que se negociaron a última hora. Pero en esta ocasión son más los temas pendientes y las posiciones muy radicalizadas.
Dentro de la propuesta se incluye un proyecto de ley para que la Cámara extienda el Programa de Seguro de Salud por seis años y retrasa un impuesto, que el republicano de Minnesota Erik Paulsen, dice que sería devastador para las compañías de dispositivos médicos del estado.
El proyecto de ley de la Cámara extiende el Programa de Seguro de Salud para niños por seis años y retrasa un impuesto que el congresista republicano de Minnesota, Erik Paulsen, dice que sería devastador para las compañías de dispositivos médicos del estado.
“A menos de que el Congreso haga algo al respecto, las compañías en el estado tendrán que comenzar a enviarle cheques al gobierno federal sobre sus ventas y no sobre sus ganancias”, dijo Paulsen.
El cierre no afectará los servicios esenciales como los cheques del Seguro Social, seguridad en el aeropuerto, controladores de vuelo o el correo, pero miles de trabadores federales serán despedidos, parques nacionales y museos cerrarán y no se podrán sacar pasaportes.
La última vez que cerró el gobierno fue entre el 30 de septiembre y el 17 de octubre de 2013 cuando los republicanos controlaban la Cámara de Representantes y los demócratas el senado y la Casa Blanca.
Antes de eso, hubo un cierre de 21 días en 1995-1996, el más largo de todos.
