MINNEAPOLIS, MN
Aunque aún faltan dos años para que comience a recolectarse la información para el próximo censo, asociaciones civiles, empresas y empleados del gobierno local de Minnesota ya han comenzado a parparse para llevar a cabo el registro.
El censo, que se realiza cada 10 años recoge, recopila, evalúa, analiza y publica o divulga características habitacionales de los hogares y datos demográficos, económicos y sociales de los habitantes de la nación.
La demógrafa del Estado Susan Brower, comenzará una gira por el estado este mes para realizar talleres en nueve ciudades para alentar a los líderes locales a promover el censo, instalarlos a crear comités de recuento completos y proporcionar consejos para llegar a los residentes que son difíciles de contar.
Brower comenzará a promover el censo en Rochester y para abril habrá cubierto nueve ciudades, incluyendo Fergus Falls, Mankato y Mountain Iron.
Añadió, que hay mucho que ver con cómo se cuenta la población y que el censo también determina cuántos representantes del Congreso recibe cada estado, por lo que Minnesota podría perder un escaño en la Cámara debido a los cambios de población.
El censo también juego un papel en los estados que reciben fondos federales. Una persona podría representar hasta mil 500 dólares en 16 programas de asistencia federal. Es por esta razón que Brower y otras asociaciones a lo largo del estado han convertido el censo del 2020 un prioridad, a pesar de ser una iniciativa federal.
Los funcionarios han comenzando a movilizarse para crear conciencia sobre el censo debido a las preocupaciones que tienen sobre el presupuesto para llevarlo a cabo y sobre cómo se pueden usar los datos y a los esfuerzos que se están haciendo para hacer un conteo digital.
En una entrevista con la Radio Pública de Minnesota, Brower dijo que “cuando llego el momento de realizar el censo, algunas personas no podrán contarse debido a que son difíciles de encontrar, ya que tienen situaciones inusuales de vivienda o móviles. Pero también hay grupos de personas que son difíciles de contaron porque no quieren que los cuenten necesariamente, aun hay personas que no confían en el gobierno”.
La ley federal exige que la información individual recopilada durante el censo se mantenga confidencial y prohíbe su uso para fines que no sean estadísticos.
