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SAINT PAUL, MN
El gobernador Mark Dayton enfrenta serios momentos ante la reacción de los miembros del partido conservador Republicano ante el anuncio hecho de que presentaría la petición de incrementar los salarios del personal administrativo del estado. De hecho, cargos importantes dentro del esquema de gobierno estatal han recibido ya el incremento salarial señalado, vigente a partir del mes pasado. Esto incluye algunos oficiales de gobierno, líderes de agencias y comisionados. A partir de este momento, se ha desatado una serie de críticas, apuntando a la reducción de gastos dentro del gobierno, a lo que ha habido respuesta por parte del gobernador.
Una intensa lucha libre de discursos que no hace más que mostrar las serias e irreconciliables, entre rudos y técnicos en un gobierno liderado por un demócrata, que tiene que gobernar con una mayoría republicana en la cámara de representantes. Lo más reciente, ha sido la invitación de Dayton a discutir el asunto en forma civilizada.
En una carta enviada a la representante Sarah Anderson, Dayton refiere a la carta enviada a la legislatura el día anterior, en la que ofrece reunirse con ella y otros miembros de su grupo político, a fin de discutir el asunto y responder a las preguntas que desearan hacer.
“Dada la preocupación expresada por usted y otros Republicanos de la casa de representantes sobre los niveles salariales de mi administración y los incrementos hechos, me interesa incluir también en la agenda de discusión las prácticas salariales de su mismo grupo político,” dice Dayton. “El director ejecutivo de su grupo recibe actualmente un salario anual de $123,971 dólares. Al momento en que usted asumió la mayoría representativa en enero, el salario de dicha persona recibió un incremento de $16,508 dólares, lo que ocurrió menos de dos meses luego de haber recibido la comisión.”
Más adelante, en la misma nota que cobró relevancia en Twitter, se alude a la posición de Jefe de Oficina de la Cámara de Representantes (una posición apartidista), quien recibe un salario de $148,000 dólares anuales, luego de haber recibido un incremento de $32,508 dólares sobre el salario previamente reportado. “Su salario actual es mayor a lo que cualquiera de mis comisionados recibió como pago antes de sus incrementos recientes, y se mantiene por encima de lo que reciben diez comisionados.”
El gobernador subraya que cree, enfáticamente, que las decisiones de incremento salarial que implementó su grupo político, se debe a la busca de mantener los mejores talentos colaborando con los esfuerzos que se desarrollan dentro de la legislatura actual. Un movimiento técnico que busca desarmar los argumentos republicanos y reestablecer la tranquilidad necesaria para que sus comisionados y altos oficiales puedan desarrollar su trabajo.
Sin embargo, en tanto se espera la respuesta de los representantes del tradicional partido republicano, el representante Roz Peterson ha propuesto la introducción de una iniciativa de ley que eliminaría la capacidad del gobernador para incrementar los salarios de los comisionados.
El mismo legislador ha señalado como “ridículos” los pagos que se han asignado en el gobierno.
Un episodio más en esta lucha sin tregua, en la que vencerá quien pueda hacer a su contrincante ligar tres caídas, y esto parece ser sin límite de tiempo.
