MINNEAPOLIS, MN
En una decisión que no debería sorprender a nadie, especialmente entre quienes se dicen conocedores de las decisiones de los jueces en casos semejantes, un grupo de dividido de jueces en el panel de la Corte de Apelaciones de los Estados Unidos, dentro del Quinto Circuito, mantuvo este martes 26 de mayo que las políticas de inmigración que un juez republicano habría bloqueado para evitar que entrara en vigor, debería continuar bloqueada.
El Quinto circuito se encuentra entre las cortes de apelación más conservadoras en el país, y su panel incluye dos de los jueces más conservadores en el país entero. Entre otras cosas, los jueces Jerry E. Smith y Jennifer Elrod se encuentran entre los seis jueces que disintieron en el caso de una ley anti-inmigrante en el 2013, en tanto que la mayoría de los jueces votaron en contra de ella.
El tercer juez en el Quinto Circuito que voto en la discusión sobre el bloqueo, fue el juez Stephen Higginson, a quien el presidente Barack Obama nombró para el cargo. Su voto fue en favor de reinstalar las políticas propuestas por la administración del presidente.
Cabe señalar que el caso se refiere a la expansión del programa ya existente Acción Diferida para Llegadas de Niños (DACA), a fin de favorecer a los padres de los ciudadanos y residentes permanentes que sean indocumentados, conocido como Acción Diferida para Padres de Americanos y Residentes Permanentes Legales (DAPA). En conjunto, ambas políticas podrían permitir a aproximadamente 4.9 millones de inmigrantes indocumentados el permanecer temporalmente en el país, de forma legal.
Por cuanto a los argumentos enarbolados para tomar una decisión, el juez Smith no presentó ningún argumento de carácter político, aun cuando existe una enorme carga política en las propuestas hechas por el presidente. Sus palabras se orientaron más bien en cuestiones relacionadas a asuntos de procedimiento, y asuntos preliminares, en lugar de discutir si el DAPA y la extensión del DACA eran o no legales.
Previamente, tanto la extensión del DACA como la aplicación del DAPA fueron detenidas por el juez Andrew Hanen, un juez nombrado por George W. Bush, mediante la aplicación de sus opiniones judiciales al ofrecer críticas a la política migratoria federal. En cambio, la posición del juez Smith ofreció una clara táctica política en contra de las medidas propuestas por el presidente, presentándose más como una decisión judicial. Sin embargo, dichos argumentos se alinean claramente con lo expuesto por Hanen, en su documento de 123 páginas que da respuesta al caso.
Como quiera que sea, el resultado de estas discusiones es que la situación queda inamovible con respecto a la situación legal de millones de familias en los Estados Unidos, entre quienes se ha esperado por un alivio temporal de los agresivos pasos que se siguen para su posible deportación.
“Por lo pronto, esta posición liderada por miembros del partido republicano, incluyendo gobernadores conservadores y abogados generales, han alcanzado su meta: preservar la inestabilidad económica y social de millones de individuos, familias, y comunidades a lo largo del país,” se puede leer en un texto presentado por la organización Progreso Americano.
Corte de apelaciones de EE.UU.: orden de no deportar inmigrantes seguirá suspendida http://t.co/xf4K72JHJc pic.twitter.com/knNC3PV7ml
— CNN en Español (@CNNEE) May 26, 2015