MINNETONKA, MN
¡Qué manera más especial de celebrar el día del cariño!
Mientras escribo este mensaje de amistad, me encuentro en la tierra que me vió nacer y cada vez que visito, me reconecto de una forma muy particular con mis raíces y especialmente con los sabores típicos de la región.
Precisamente este fin de semana tuve la fortuna de dar largas caminatas en Antigua Guatemala (capital antigua), una ciudad relativamente pequeña en comparación con la capital actual que data a los tiempos de la colonia, con una arquitectura impresionante y ruinas que quedaron a raíz de varios desastres naturales, calles empedradas y unas 30 iglesias, la cual ha sido declarada un sitio UNESCO de la humanidad.
Mientras recorría las pintorescas calles y observaba cuidadosamente cuanto ha crecido el comercio dado al alto nivel turístico, me percaté de estudiar detenidamente la gastronomía del lugar. Antigua, como sus habitantes la llaman, siempre ha sido un lugar importante y especial en este campo, ya que posee platos criollos de la región central del país como también muchos productos artesanales como dulces típicos, chocolate y café, al igual que platillos como la Piloyada Antigüeña y el Pepián, el Mole de Plátano y otros.
Por ser un lugar de mucho interés tanto cultural como gastronómico, atrae a variedad de inmigrantes y delicias de otros países latinos y asiáticos, europeos y del medio oriente. No obstante, la influencia extranjera, los platos autóctonos, o comida típica como se le conoce, abunda en lugares de muy buena calidad. Para los que visitan de fuera, encontraran aquí un paraíso en clima, precios favorables, y gente muy hospitalaria.
Es común que caminando en la calle alguien salude con unos buenos días –tardes o noches- como también lo es un “buen provecho” en un comedor o restaurante proviniendo de un desconocido. La gente de ciudades que semejan más a un pueblo tiende a ser más calurosa y especial. Me siento tan a gusto aquí que el paisaje, valor histórico y cultural, son un bono agregado.
Un lugar para observar la cocina popular de cada lugar son los alrededores de una iglesia o parque o un mercado municipal, especialmente la cultura de los comedores de mercado ya que atraen a una variedad de clientes. Las propietarias de cada comedor tienden a darle la bienvenida a sus comensales desde la entrada y servicio, hasta la salida, con un “pase adelante,” “muy buen provecho,” y “que le vaya bien.”
Este día del cariño quiero celebrarlo con una receta especial y dedicárselo a Antigua Guatemala, una ciudad que no sólo es especial en muchos sentidos antropológicos, sino que tiene un lugar muy especial en mi corazón ya que es uno de los lugares de fin de semana que a menudo visité con mi padre (QEPD) en mi infancia.
¡Feliz Día del Cariño y La Amistad!
PILOYADA ANTIGUEÑA
Ensalada de Chorizo y Frijoles Rojos.
Receta de la Chef Amalia Moreno-Damgaard. AmaliaLLC.com
Los piloyes son frijoles rojos nativos de Guatemala. Son más redondos y más planos que los frijoles negros. Este plato puede ser una comida principal acompañada de tortillas tostadas o pan francés estilo baguette, o puede constituir un entremés o boquita (botana) para picar durante una reunión.
Sirve de 4 a 6 personas
- 2 tazas de piloyes lavados (o red kidney beans)
- 1/2 lb. lomo de cerdo, cortado en cubos de 2 pulgadas
- 1 cebolla entera, pelada
- 1 cabeza de ajos sin pelar
- 5 tazas de agua
Vinagreta
- 1 oz (1/8 taza) vinagre de champan o blanco
- 1 cdita ajo finamente picado
- 1 hoja de laurel
- ¼ cdita tomillo
- 2 oz (1/4 taza) aceite oliva
- Sal kosher y pimienta recien molida al gusto
Adorno
- 1/4 taza chorizo español en rodajas diagonales delgadas
- 1/4 taza de tiras de jamón de 2 pulgadas de largo
- 1/4 taza jamón serrano en pedacitos
- 1/4 taza de tomates en cubos pequeños
- 1/2 taza queso cotija desmoronado
- 1/4 taza de chile morrón rojo (dulce) en juliana
- 1 cda cebolla roja en juliana
- 1/4 taza perejil de hoja plana ligeramente picado
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- Combine los frijoles, el cerdo, la cebolla, el ajo y el agua en una olla Crock-Pot puesta en alto. Cubra y cueza los frijoles hasta que estén suaves, unas 3-1/2 horas. (Alternativamente, remoje los frijoles toda la noche y luego cuézalos en la misma agua en una olla en la estufa por 1-1/2 horas). Deshágase de la cebolla y el ajo. Permita que se enfrien.
- Combine todos los ingredientes de la vinagreta en el vaso de la licuadora y procese hasta formar una salsa fina y homogénea.
- Transfiera los frijoles y el cerdo a un recipiente con 1-1/2 tazas de caldo. (Guarde el resto del caldo para otra receta). Agregue la vinagreta y mezcle bien. Rectifique la sazón ya que los frijoles no contienen sal. Deje reposar unos 20-30 minutos para mejor sabor.
- Termine decorando la ensalada con todos los adornos en el orden listados distribuyéndolos a cubrir la superficie del los frijoles de una forma atractiva.