MINNEAPOLIS, MN
Denny Hecker, quien fuera un prominente hombre de negocios del ramo automovilístico encarcelado hace casi 8 años por fraude, ha sido liberado de la prisión en que se encontraba y trasladado a un centro de rehabilitación, de acuerdo al Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Hecker fue sentenciado a pasar 10 en años en prisión luego de haberse declarado culpable de defraudar a Chrysler Financial y otros fabricantes de automóviles por millones de dólares. También admitió haber alterado documentos del préstamo para pedir prestado mucho más dinero del que tenía derecho, así como de esconder dinero de la corte después de declararse en bancarrota.
Hecker de 65 años, se declaró culpable en 2010 de dos cargos de fraude, sirvió su tiempo entre el Campo de Prisión Federal en Duluth desde 2011 y el Instituto Correccional Federal en Pekin, Illinois, entre otras instalaciones y será trasladado a un centro de rehabilitación en Minneapolis.
Se supone que su sentencia original lo mantendría detrás de las barras hasta el 2019, sin embargo su sentencia fue reducida por un año. Su fecha de liberación será el 4 de julio de este año, aunque las autoridades no han dado conocer los motivos.
Hecker fue capturado cuando el FBI descubrió que había cobrado en secreto un plan de seguro y vivía con tarjetas de débito pre-cargadas. El FBI confiscó las tarjetas de débito de Hecker, pero él y su futura esposa, Christi Rowan, las volvieron a emitir en secreto.
Al declararse en bancarrota, Hecker eliminó más de cuatro millones de dólares que había contraído en deuda, el caso fue turnado al Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en Minnesota en donde un juez dictaminó que el dinero debería dividirse entre las cuentas de Hecker, el U.S. Bank y Chrysler, a lo que su abogado se opuso, argumentando que el dinero era producto de “un contrato de trabajo”.
Hecker, quien comenzó como vendedor de autos creó un imperio en el ramo automotriz que despegó dramáticamente después de 1999, pero a medida que creció su negocio también crecieron sus gastos.
La Gran Recesión y la implosión de la industria automotriz pusieron al descubierto las fallas en su negocio, que en aquel entonces valía aproximadamente 6.8 billones entre sus 26 concesionarias, varias firmas de renta de flotas, la cadena Advantage Rent-A-Car y decenas de compañías de responsabilidad limitada con diferentes nombres.