MINNEAPOLIS,MN.-
Los menores latinos que experimentan problemas de salud mental en la escuela intermedia tienen más probabilidad de sufrir problemas de sueño, ganar peso excesivo y tener un comportamiento sedentario en los años subsiguientes, indica un estudio que publica este lunes la revista Journal of Adolescent Health.
Los investigadores apuntaron que los comportamientos insalubres vinculados con la salud mental pueden presentarse a edades tempranas y derivar en obesidad, presión arterial alta, diabetes y otros problemas serios de salud.
“Nuestro estudio indica que la depresión o la ansiedad en los niños latinos pueden iniciar un ciclo que conduce al aumento de peso, una dieta no sana e inactividad en los últimos años del bachillerato”, señaló Kathleen Roche, del Instituto GW Milken de Salud Pública en la Universidad George Washington.
“Si tales problemas no son abordados en etapas tempranas pueden allanar el camino a enfermedades en la edad adulta como males cardiacos y ataques cerebrales”, añadió.
Roche y sus colegas analizaron la información sobre 547 estudiantes de escuela intermedia en los suburbios de Atlanta (Georgia), en su mayoría ciudadanos estadounidenses.
En Estados Unidos la escuela intermedia habitualmente comprende del grado sexto al octavo cuando los alumnos tienen entre 11 y 14 años de edad.
Los estudiantes tenían en promedio 13 años de edad cuando comenzó la encuesta y de 17 años cuando se hizo la evaluación más reciente.
A los menores se les hicieron preguntas acerca de su dieta, patrones de sueño y actividad física, y también sobre síntomas de salud mental como depresión y ansiedad.
El estudio halló que los menores que tenían síntomas mentales tenían más probabilidades de ser sedentarios, reportar problemas de sueño y tener una dieta insalubre, y a tener sobrepeso u obesidad solo cuatro años más tarde. Todos estos son factores de riesgo que pueden conducir a males cardiovasculares en la adultez temprana.
Según el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Estados Unidos, los estudiantes latinos de bachillerato tienen 50 % más probabilidades que los blancos de ser obesos y tienen un riesgo mucho más alto de desarrollar diabetes.
Las conclusiones del estudio representan una señal clara de que los adolescentes, incluidos los que todavía están en la escuela intermedia, pueden sufrir problemas de salud mental que continúan en los años del bachillerato y pueden dar entrada a otros problemas como la obesidad.
Asimismo, apuntan a la necesidad de más servicios de salud mental y asistencia social para aliviar las aflicciones de salud mental de los adolescentes latinos.
Roche dijo que los padres y madres, maestros y profesionales de la salud deberían estar atentos a síntomas de trastornos mentales y listos para buscar el tratamiento que mantenga a sus adolescentes activos y sanos.
La investigadora señala que un tratamiento oportuno de salud mental puede ayudar a los adolescentes a dejar de comer en exceso y a involucrarse en actividades físicas.
Un estudio dirigido por Roche en 2020 había señalado que la deportación o la detención de un miembro de la familia pone a los adolescentes latinos en un riesgo más alto de pensamientos de suicidio y otras amenazas para su salud mental.
Otra investigación de Roche publicada en 2022 mostró que los adolescentes latinos que asumieron más responsabilidades en el cuidado de niños durante la pandemia de covid-19, mostraban mayores síntomas de depresión y ansiedad, y problemas de conducta como la agresión.