DESPIDEN A ENTRENADOR DE LA UNIVERSIDAD POR ESCANDALO DE CIRCULACION DE MEDICAMENTOS

MINNEAPOLIS, MN

Fueron varias semanas luego de que se expusiera una investigación que implicaba al departamento de atléticos y en especial al programa de lucha de la Universidad de Minnesota. Una investigación que implicaba a cuatro estudiantes por el tráfico compra-venta de medicamentos nocivos en grandes cantidades, presumiblemente estimulantes para la práctica de esta especialidad.

Mas grave, la inclusión de J. Robinson en la investigación de un entrenador con categoría de “leyenda” dentro de la universidad y circuito de lucha “wrestling” en la nación. Robinson fue entonces puesto en suspensión temporal para desarrollar una mejor investigación y mantener en control la reputación del programa y de la turbulenta universidad que venia de una serie de escándalos internos en su departamento de atléticos.

Este Miércoles se anunció finalmente la destitución del entrenador al no acceder a contestar directamente las preguntas de los directivos e investigadores al momento de ser cuestionado, dejando en claro su implicación pasiva y su participación en corrección del problema, en un método claramente no convencional y que impedía que este problema fuera del conocimiento de las autoridades escolares. Así, en una conferencia de prensa el director de atléticos respondía solo a lo correcto dejando de fuera especulaciones y terminantemente denunciando el deslinde del afamado entrenador con la institución.

 Previamente en El Minnesota de Hoy

De acuerdo con funcionarios de la misma universidad, habría dado aviso a la policía a fin de iniciar investigaciones sobre el caso a partir del mes de marzo pasado.

Fueron cuatro los deportistas de la Universidad de Minnesota, que practican la Lucha deportiva, quienes se encuentran bajo investigación por haber vendido en forma ilegal el medicamento Xanax.

Ante esta situación, el entrenador del equipo de lucha de la universidad, J. Robinson, declaró que él había sido quien colectó cerca de 1,400 píldoras del sedante Xanax, que se distribuye exclusivamente mediante prescripción médica. Estas píldoras se encontraban en manos de miembros del equipo que estaban listos para comenzar la distribución y vena del estupefaciente. Sin embargo, uno de los miembros del equipo de lucha indicó que Robinson había optado por no denunciar el hecho a la policía sino hasta el mes de marzo citado.

El luchador, quien ha solicitado mantener su nombre en el anonimato, dijo que fue él mismo quien llamó a la policía, denunciando la forma en la que Robinson había manejado el caso. Como consecuencia, hoy hay una investigación en curso que involucra a la totalidad del equipo de lucha, y al mismo entrenador. Dicha investigación es liderada por el cuerpo policiaco de la misma Universidad.

En una declaración inicial, el informante anónimo indicó que en cierto momento, cuatro miembros del equipo de lucha habían colectado 2,500 píldoras de Xanax, que habían obtenido vía correo por parte de un ex miembro del equipo, y que fueron vendidas en el dormitorio del Hall de la Avenida 17 en el campus universitario.

“Eran $5 dólares por píldora si eras miembro del equipo, y $8 para cualquier otra persona,” dijo el informante, quien dijo estimar que entre 10 y 12 miembros del equipo abusaban en el consumo del estupefaciente. El mismo dijo también que los luchadores vendían las píldoras también a miembros de otros deportes en el área atlética de los Gophers.

Para Robinson, de 69 años de edad, y cumpliendo su 30ª temporada como entrenador en jefe del equipo de lucha, el asunto viene a manchar una carrera impresionante, siendo nombrado en tres años el mejor entrenador del año, trayendo también tres campeonatos nacionales en lucha para la UMN, que son hasta ahora los únicos títulos nacionales en el programa.

En marzo, Robinson habría convocado a una reunión.

“Pensábamos que era una reunión típica con J,” dijo el informante anónimo. “Pero entonces, él comenzó a decir, ‘sé quiénes están tomando las píldoras, y sé quiénes las están vendiéndoselas. También sé quiénes las están robando.’ Y luego dijo, ‘es el fin de semana de pascua. Estaré en mi oficina el viernes, el sábado y el domingo. Si estás involucrado, ven y dímelo. Si tienes algunas pastillas, tráelas contigo a mi oficina y yo me desharé de ellas, y así te ofreceré amnistía.

El caso viene sumándose a una serie de problemas y controversias dentro del departamento atlético de la Universidad de Minnesota, quienes recientemente han asignado a un nuevo director en cargo.

Here’s J. Robinson’s three-page response to the internal investigation from late August. pic.twitter.com/r8BMTG3cqc

— Iris Pérez (@IrisPerezFOX9) September 7, 2016