SAINT PAUL, MN
Una ciudad cercana a la capital del estado, Forest Lake, en el condado de Washington, y otra cercana a Faribault, Morristown,en el condado de Rice, discuten estos días sobre la pertinencia de contar con un cuerpo policiaco propio, que se sostenga con recursos de las ciudades mismas, o bien que se disuelva y la vigilancia de las mismas caiga en manos de las autoridades del condado.
En el caso de la ciudad de Morristown, se cuenta con un volumen de población mínimo, lo cual ha sido argumento para que el concejo ciudadano proponga la desaparición del cuerpo policiaco local, y que la labor preventiva caiga sea responsabilidad del condado. Morristown, que se encuentra en el extremo suroeste del condado Rice, suma un estimado de 984 habitantes.
Por otro lado, la ciudad de Forest Lake, tan solo a 27 millas al norte de St. Paul, cuenta con un estimado de población de 20,261 habitantes. Ahí, 23 oficiales verían sus empleos desaparecer, con el argumento de que se lograría un ahorro en el presupuesto de $300 mil dólares, al no tener que cubrir los salarios de esos policías. Así lo ha manifestado el alcalde Ben Winnick, quien sugiere que las obligaciones de vigilar por la seguridad de los ciudadanos, podrían caer bajo la responsabilidad de la policía del condado, y, de ser necesario, del estado.
En ambos casos, la idea que se ha manejado sería la de contratar el servicio con el condado. La idea, en el caso de Forest Lake, se sustenta en el incremento en el volumen de población y la incapacidad para cubrir los costos que implica el mantener un cuerpo de policía efectivo. El alcalde Winnick estima que hoy el costo de contar con policía local representa el 56 por ciento del presupuesto de gastos de la ciudad.
Bajo el plan presentado, al contratar con el condado, el número de patrullas se incrementaría de 23 a 25, y se confía en que los elementos que vigilen la seguridad de la ciudad estarán mejor preparados. A ello se opone un significativo número de habitantes de la ciudad, argumentando que los propios policías, aun en activo, no tienen por qué perder sus empleos. La decisión final se tomará a principios del mes de mayo.
En el caso de Morristown, el concejo de la ciudad aprobó la propuesta de que sea la oficina del Sheriff del Condado de Rice quien tome la responsabilidad del cuidado de la ciudad, medida que entraría en vigor a partir del mismo mes de mayo.
Habitantes de la ciudad se han dado a la tarea de recabar firmas para revertir la decisión. Hasta el fin de semana pasado, se reportaban 300 firmas de apoyo, lo que representa el 30 por ciento del total de la población de la ciudad.
Todos ellos expresan estar de lado del único miembro del cuerpo policiaco local, quien, dicen, ha estado de su lado por cinco años.
El alcalde de la ciudad de Morristown, Kurt Wolf, indicó que entiende a los descontentos, pero indica que al contratar con la policía del condado, la ciudad se ahorrará $50 mil dólares, tan sólo durante el primer año.
Coincidentemente, en ambas ciudades, quienes se oponen a las medidas propuestas, reclaman que se está perdiendo la identidad local, y que sus voces han sido acalladas. Historia de dos ciudades.