MINNEAPOLIS, MN.-
Las batallas legales por las purgas electorales en EE.UU. continúan a nueve días de las elecciones del 5 de noviembre ya que este domingo un tribunal de apelaciones frenó un intento del estado de Virginia de eliminar a cientos de votantes de sus listas.
En una decisión unánime, el Cuarto Tribunal de Apelaciones ordenó hoy al gobernador de Virginia, el republicano Glenn Youngkin, incluir nuevamente en las listas electorales a unos 1.600 votantes que habían sido retirados por dudas en su elegibilidad.
El estado de Virginia comenzó la purga electoral el pasado 7 de agosto con la que retiró los nombres de los votantes considerados como posibles no ciudadanos.
El fallo de hoy confirma el de la jueza federal Patricia Giles, que la semana pasada ordenó poner fin a la purga, en respuesta a una demanda del Departamento de Justicia de EE.UU. y de los defensores de los derechos de los votantes.
Los demandantes alegaron que la ley federal prohíbe a los estados eliminar sistemáticamente a personas de las listas de votantes dentro de los 90 días previos a una elección.
Por su parte, la Fiscalía de Virginia argumentó que la prohibición federal no se aplicaba a los esfuerzos para evitar el fraude electorales.
La denuncia de Virginia se suma a decenas de acusaciones infundadas por parte de otros gobiernos republicanos -incluyendo Florida y Alabama- de que miles de extranjeros no autorizados votarán en las presidenciales.
No se descarta que Virginia lleve esta semana la querella legal a la Corte Suprema.
Esta no es el único litigio sobre purgas electorales en EE.UU. a pocos días de las elecciones.
El pasado miércoles el fiscal general de Texas, Ken Paxton, interpuso una demanda en la que acusa al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de no dar suficiente apoyo al Estado para verificar si unas 450.000 personas registradas para votar en el estado tienen la ciudadanía.
El secretario de Estado de Ohio, el republicano Frank LaRose, inició una querella legal similar el jueves pasado contra el DHS
Más de 30 casos relacionados con las purgas de votantes se han presentado en al menos 19 estados en el país, que incluyen a Nevada y Carolina del Norte, según el rastreador de litigios electorales Democracy Docket.