Washington, 7 mar (EFEUSA).-
El enviado especial para Venezuela, Elliott Abrams, aseguró hoy que su Gobierno no está negociando con Cuba para facilitar la salida del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
Abrams ofreció esa información durante una audiencia titulada “Las relaciones entre EE.UU. y Venezuela y el camino a una transición democrática” en el comité de Exteriores del Senado.
El senador demócrata Bob Menéndez, crítico con Maduro y el Gobierno cubano, preguntó a Abrams si el Ejecutivo estadounidense ha hablado con La Habana sobre una salida para Maduro, a lo que el diplomático contestó: “No, no estamos discutiendo con Cuba el futuro de Maduro”.
En las últimas semanas se multiplicaron las especulaciones sobre la posibilidad de que Maduro esté buscando un refugio por si se viera forzado a dejar el poder ante la presión de parte de la comunidad internacional, que respalda al líder opositor Juan Guaidó como presidente “legítimo” de Venezuela.
El 23 de enero, Guaidó invocó la Constitución para reclamar que, como jefe del Parlamento, tenía la autoridad de declararse presidente al considerar ilegítima la toma de posesión de Maduro el día 10 de ese mes como fruto de unas elecciones celebradas en mayo y cuestionadas por parte de la comunidad internacional.
En una entrevista con Efe en febrero, Julio Borges, embajador ante el Grupo de Lima de Guaidó, aseguró que Maduro estaba “tocando la puerta” de países árabes y del este de Europa para su retiro.
EE.UU. fue el primer país en reconocer a Guaidó como presidente y, desde entonces, ha tomado diferentes acciones para presionar a Maduro: desde restricciones de visados a funcionarios venezolanos hasta sanciones a la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa), una de las principales fuentes de divisas para Caracas.
Ante el Senado, Abrams adelantó que habrá más sanciones a bancos que estén ayudando a Maduro a “robar” los recursos del país, como el oro o el petróleo.
Los senadores preguntaron a Abrams sobre si dentro del Gobierno se han debatido planes para intervenir militarmente en Venezuela, a lo que el diplomático respondió explicando que siempre se analizan “planes de contingencia” para estar preparados si las circunstancias empeoran.
Concretamente, Abrams indicó que siempre hay planes para proteger las embajadas en el mundo y para salvaguardar la seguridad de los ciudadanos estadounidenses, pero no ofreció más detalles.
El presidente, Donald Trump, ha avisado en varias ocasiones de que “todas las opciones están sobre la mesa”.
Sin embargo, diez de los países del Grupo de Lima (Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay y Perú) reiteraron a finales de febrero su rechazo a una intervención militar en Venezuela.