SAINT PAUL, MN
El senador reelecto por Minnesota, Al Franken, se encuentra una vez más en las noticias del país.
La fama de este político se desprende de su tiempo en el show Saturday Night Live, en donde adquirió prominencia al ser escritor y actor durante las décadas de 1970 y 1980. Franken también ha escrito diversos libros que han sido merecedores de ocupar un lugar en las listas de bestsellers. Entre ellos, Mentiras y los Mentirosos que las Dijeron: Una Mirada Justa y Balanceada sobre la Derecha, que fue una dura crítica en forma de sátira a la política conservadora de los Estados Unidos.
Hoy, Franken ha sido señaldo como poseedor de una fortuna que le coloca por sobre el promedio en Washington, a diferencia del resto de los congresistas representando Minnesota. Ben Johnson, escritor de City Pages, un diario local de Minnesota, ha dicho que “La riqueza mínima de los representantes al congreso por parte de Minnesota se encuentran en un rango que va desde los $2.9 millones de reserva del senador Al Franken, a los reportes de fortunas en números negativos de los representantes John Kline, Betty McCollum y Keith Ellison.”
Estos datos se encuentran entre los reportados por Roll Call, firma que monitorea los ingresos de los legisladores, y en el que se establece que el congreso suma una fortuna de alrededor de $2.1 mil millones de dólares, si se agregan las fortunas individuales de senadores y representantes. Esto es, un incremento en $150 millones de dólares en comparación con el año anterior. Sin embargo, es importante destacar que tan solo 5 de los políticos más ricos, concentran cerca del 40 por ciento de la riqueza acumulada de todo el congreso.
Al Franken logró incrementar su fortuna en cerca de $900,000 dólares en el último año, mayormente fruto de las regalías por la venta de sus libros, y de los beneficios que ha obtenido a partir de inversiones en diversos fondos. Así, aun cuando Franken reporte una fortuna saludable, en tanto sus compañeros en el congreso representando a Minnesota reporten lo contrario, el senador no se encuentra entre los políticos más ricos en Washington.
En tanto, las campañas políticas que se desarrollaron este año, sumaron grandes fortunas a fin de apoyar a los diversos candidatos. Los candidatos demócratas a la casa de representantes invirtieron más de 410 millones de dólares, en tanto que los republicanos pusieron sus números en cerca de 550 millones. Quienes corrieron por una curul en el senado, lograron gastar 266 millones de dólares los demócratas, y 287 millones los republicanos. Campañas onerosas, que tienen repercusión en los bolsillos de quienes le apoyan.
Los datos se encuentran en el Center for Responsive Politics, como ha sido publicado hoy en el sitio OpenSecrets.org.