MINNEAPOLIS, MN
Los llamados milenials, los jóvenes nacidos entre 1981 y 1997 y la mayor generación de la historia de Estados Unidos, tienen menos acceso a una vivienda propia que las dos generaciones previas, según un estudio divulgado hoy por el Urban Institute.
Comparados con la Generación X o los Baby Boomers, al llegar a una edad comprendida entre los 25 y 34 años solo el 37% de los milenials eran propietarios de una casa, según datos de 2015, un porcentaje que es menor en 8 % que el de sus antecesores.
Según el estudio, a pesar de ser considerados más educados y expertos en el uso de la tecnología, además de racial y étnicamente diversos, los jóvenes milenials se casan más tarde y también demoran comprar una vivienda.
El informe agrega que un casamiento incrementa la probabilidad de poseer una casa en un 18 %, además de tener en cuenta otros factores como edad, ingresos, raza/origen étnico y la educación.
También destaca el estudio que la creciente diversidad de esta generación contribuye a una baja tasa de propiedad, dado que se ha comprobado que los hogares blancos no hispanos tienen tasas mayores de propiedad que todos los demás grupos raciales.
Otros factores que influyen, según el Urban Institute, son el monto creciente de las deudas contraídas con préstamos para la educación y la demora en tener hijos.
Señala que entre los casados, el nacimiento de un hijo incrementa en 6,2 % la probabilidad de ser propietarios de una vivienda.
Igualmente la preferencia de los milenials educados por mudarse a centros urbanos más caros es otra de las importantes causas de las bajas tasas de propiedad de inmueble.
El estudio identifica como “área de gran preocupación” la brecha de propiedad inmobiliaria existente entre la población más y menos educada, que ha crecido “significativamente” en comparación con generaciones previas.
Entre los años 1990 y 2015, la tasa se incrementó del 3,3 % al 9,7 % entre los grupos, entre otras razones por los ingresos inestables de los menos educados.
El Urban Institute sugiere como futuras políticas para incrementar el acceso de los milenials a la vivienda la mejora de la educación financiera durante la escuela secundaria y el uso de la tecnología para simplificar el proceso de las hipotecas.