EDEN PRAIRIE, MN
Los resultados de una encuesta de salida revelaron que el presidente ruso, Vladimir Putin, obtuvo el 71.97 por ciento del apoyo de los electores en la elecciones que se llevaron a cabo ayer domingo con el 21.33 por ciento de los votos escrutados, según los primeros resultados oficiales .
A pesar de las quejas sobre su supresión a la disidencia y el reproche de Occidente por la postura cada vez más agresiva en Rusia por los asuntos mundiales y su supuesta interferencia en las elecciones estadounidenses de 2016, la popularidad de Putin sigue en aumento.
Con esta victoria electoral, el hombre que ha liderado el país más grande del mundo durante todo el siglo XXI, ha agregado seis años más en el Kremlin. Aun cuando la votación estuvo empañada por los informes generalizados sobre el relleno de las urnas y el voto forzado.
La Comisión Electoral Central (CEC), informó que en segundo lugar quedó el candidato comunista y millonario Pável Grudinin, con el 15.90 por ciento de los votos. Le siguió el ultranacionalista Vladimir Zhirinovski con 6.9 y la periodista Ksenia Sobchak con el 1.4 por ciento de los sufragios.
Los resultados oficiales son parciales y solo corresponde a las regiones del Lejano Oriente y Siberia, quienes fueron los primeros en cerrar las casillas, por lo que aun puede haber cambios en los resultados definitivos.
Unos 110 millones de rusos acudieron a votar en estas elecciones presidenciales en las que participaron por primera vez los habitantes de la península de Crimea y en las que Putin obtuvo el mejor resultado de su historia, asegurándole su estadía en el Kremlin por un nuevo mandato de seis años, hasta 2024.
Cumpliéndose cuatro años de la reunificación de Crimea con Rusia, según la CEC, Putin obtuvo el 91.69 por ciento de los votos en esa región, emitidos por los 1.5 millones de electores que acudieron a las urnas.
Con el conteo del 80 por ciento de los recintos, Putin había acumulado el 76 por ciento de los votos.
Desde que Putin tomó el control en Rusia, luego de la sorpresiva renuncia de Boris Yeltsin, en la víspera del Año Nuevo de 1999, el poder electoral de Putin se ha centrado en la estabilidad, una cualidad apreciada por los rusos después de la desintegración caótica de la Unión Soviética.