SAINT PAUL, MN
Este sábado, 31 de marzo, se realizaron diversas manifestaciones bajo el slogan de “rallies al Capitolio en defensa de nuestros derechos a portar armas.”
A lo largo del estado, se presentaron expresiones de apoyo a dicha demanda, con quienes la promueven cargaban banderas de Gadsden (banderas amarillas con una serpiente cascabel en posición de ataque, en las que se le lee el slogan “no me amenaces” o bien “juro a Dios que nos mataré a todos si me molestas.”
Muchos entre quienes se manifestaron, lo hicieron incluso cargando armas de diversos calibres, a fin de mostrar su apoyo a la segunda enmienda, así como para expresar su desencanto con los legisladores de Minnesota.
Al manifestarse, los protestantes indicaban su sentir de que los propietarios de armas no eran respetados en los días presentes, y que ellos y sus derechos se encuentran hoy bajo ataque. Así lo expresó el organizador de la manifestación, Chris Dorr.
Entre los grupos que patrocinaron este evento se encuentran Derechos de Armas de Minnesota y la Alianza de Libertad Estrella del Norte. Entre los oradores destacan los nombres de los hermanos Ben y Chris Dorr, quienes intentaron responder y contraponer a la creciente presión que se ha desatado en contra de la posesión de armas, como consecuencia de lo ocurrido en Parkland, Florida. Los acontecimientos provocaron la muerte de diversas personas, y desató un movimiento nacional demandando mayor control en el uso y portación de armas, y que tan sólo en la ciudad de Saint Paul se habrían contabilizado al menos 18,000 manifestantes.
Los líderes de la protesta, como los hermanos Dorr, esperan poder cambiar la tendencia que apuntan a una legislación que permita mayor control de la portación y uso de armas, y en cambio proponen la introducción de una iniciativa de ley que otorgue mayor protección en el empleo de armas en acciones de defensa propia, iniciativa llamada “mantente en pie”. Los mismos apoyan también la iniciativa de ley “portación constitucional,” que eliminaría la necesidad de portar un permiso legal. Ambas iniciativas se han atorado en los comités que las revisan.
Para quienes se manifestaron, las acciones como la ocurrida en Parkland son aisladas y no se relacionan con la portación de armas. Por ello, las medidas que propondrían mayor control sobre el asunto, son presentadas como ataques directos contra sus derechos, y sus personas. Algunos de los manifestantes expresaron que estaban profundamente preocupados debido a que consideran inminente que la Segunda Enmienda sea eliminada, y que será la primera de muchas medidas que le seguirán como efecto dominó, en la eliminación de los derechos, los suyos.
Participantes cargaban letreros en los que se leía que lo que la gente busca con el uso de armas, es “proteger a nuestros niños,” situación que hoy, a sus ojos, se ve como inevitable.
Así, al volver a sus oficinas, los legisladores tendrán que resolver sobre estas iniciativas de ley, y la enorme serie de demandas para controlar más efectivamente la portación y uso de armas de fuego, como ha sido presentado por el otro grupo que forma parte de un clamor nacional, y representado en millones de personas.